Hace apenas 4 años que nació Hobeen, una startup con sede en Gasteiz y con las ideas muy claras: ofrecer soluciones de ahorro energético y sostenibilidad a los ciudadanos, a través de instituciones públicas o empresas. Y en esta breve trayectoria, Hobeen ha recibido ya varios reconocimientos. Por ejemplo, ha sido la startup elegida, entre más de 2.170 compañías de todo el mundo, para formar parte del programa internacional de LG Nova 'Mission for the Futur'.
Mario Fernández es CEO y fundador de Hobeen. Comenzó él solo esta aventura y, hoy, el equipo de esta startup alavesa lo forman ya 13 personas. Su objetivo es reducir el consumo energético y ayudar a la ciudadanía a ser más sostenible. Esta startup forma parte del ecosistema vasco de emprendimiento UpEuskadi que impulsa y coordina la agencia de desarrollo empresarial SPRI, dependiente del Gobierno Vasco. De hecho, Mario Fernández se siente muy agradecido "por todo el apoyo que hay al ecosistema del emprendimiento en Euskadi. Nuestra primera subvención vino de la mano de SPRI, 'Ekintzaile'. Tuvimos una pequeña subvención de 25.000 euros para hacer el estudio de mercado, un análisis de negocio en condiciones, y empezar a probar y validar la idea. Y recientemente hemos recibido, también por parte de SPRI, una calificación fiscal para poder participar dentro de la SICTED, que es un programa de reconocimiento. Y luego hay otras iniciativas como Alava Emprende, Alava Innova, Elkargi, etc..."
“ Tansformamos la relación de la ciudadanía con la energía ”
Mario Fernández, CEO y fundador de Hobeen
Entrevistado en Onda Vasca, el CEO de Hobeen explica que "a nosotros nos contrata una empresa o una institución pública que después hace llegar nuestra plataforma, nuestro software, a sus clientes, ciudadanos o empleados".
Destaca que Hobeen tiene dos tipos de funcionalidades. Una es la que llaman "empoderamiento" y a través de la que ofrecen formación al ciudadano en temas relacionados con sostenibilidad y energía y lo hacen de forma amena "damos charlas formativas, tenemos una aplicación en la que establecemos retos para que los ciudadanos los puedan poner en marcha, subimos contenido interactivo y pueden compararse entre ciudadanos, a ver quién está llevando a cabo más acciones sostenibles, etc... Es decir, está gamificado. Además, los usuarios pueden conectar el contador de su vivienda, empezar a recibir todos los datos de consumo y ver si las acciones que están llevando a cabo realmente tienen repercusión en sus consumos. Y les damos recomendaciones personalizadas". Añade Fernández que esta parte "es interesante para ayuntamientos o instituciones públicas que estén abriendo, por ejemplo, una 'oficina verde' o empresas que quieran formar a sus empleados."
La otra funcionalidad que ofrece Hobbeen es la del "control". Tal y como nos explica Mario Fernández "somos compatibles con los dispositivos que controlan y gestionan la energía en el hogar. Así, controlamos el autoconsumo, la aerotermia, la calefacción, el aire acondicionado, el consumo de electricidad o el consumo de agua. Tenemos, de hecho, unos enchufes para poder apagar el termo eléctrico, tenemos un algoritmo de inteligencia artificial que nos permite saber cuáles son los dispositivos que más consumen para poder tomar decisiones como poder cambiar de electrodomésticos, etc... Esta parte de control es interesante para promotoras, agentes de rehabilitación energética que quieran no solo rehabilitar o crear un tipo de viviendas, si no también habilitar a las personas".
“ La persona en el centro, la energía como motor de transformación y la vivienda como lugar de cambio ”
Mario Fernández, CEO y fundador de Hobeen
Hobeen nació de la tradición familiar de Mario Fernández, muy relacionada con el mundo empresarial, y de un curso de emprendimiento que hizo mientras estudiaba Derecho y Administración de Empresas en la Universidad de Navarra. "Teníamos un negocio de hostelería y dos negocios más, uno de energía con instalaciones fotovoltaicas y el otro, de promoción inmobiliaria, relacionado con la construcción de casas. En 2008 los tres negocios se vinieron abajo. Pero recuerdo que mi padre me venía, cuando yo estaba haciendo los deberes, y me hablaba de energía y de vivienda. Yo creo que eso hizo poso, se quedó en mi ADN y cuando estaba haciendo ese curso de emprendimiento decidí unirlo. Combiné la parte energética y la falta de formación y conocimiento que los ciudadanos, en general, tenemos sobre este sector, sus beneficios y las oportunidades que genera con la vivienda, con un parque de viviendas antiguo, obsoleto, etc... De ahí surge la combinación de ambos mundos, la persona en el centro, la energía como motor de transformación y la vivienda como lugar de cambio".