La patrona de Cintruénigo, la Virgen de la Paz fue ayer la protagonista del programa de las fiestas de la localidad ribera pero también los fueron sus casi 8.000 vecinos y vecinas, que fueron homenajeadas por su Ayuntamiento.
Trabajadores y representantes de las fuerzas de seguridad con las placas.
Ayer era el día en que se nombraba al Cirbonero Popular, un título que se entrega a aquellas personas que han destacado durante el año por su trabajo o por sus acciones. Tras dos años de sufrir pandemia y confinamiento, el Ayuntamiento que preside Óscar Bea decidió entregar ese título a sus vecinos y vecinas.
Un grupo de joteras cirboneras dedican una canción a la Virgen de la Paz.
En un acto institucional celebrado en la plaza del Ayuntamiento, el alcalde inauguró una placa a las puertas de la Casa Consistorial en reconocimiento al pueblo como popular del año debido a la solidaridad, sufrimiento y penalidades de la población por la covid 19, una población que sufrió muchas pérdidas de personas a las que sus familias no pudieron despedir. Posteriormente se entregaron unas placas al jefe de la policía foral de Tudela, al de Protección Civil de Cintruénigo, al cabo de la policía local ya jubilado, Rafael Rández, al conserje del colegio público, Javier Fernández, y al jefe de mantenimiento de vehículos municipales, José Luis Huici.
Niños y niñas comulgantes acompañan a la imagen de la Virgen.
Antes de este acto, a las 8.00 se había celebrado por primera vez un encierro de toros con los 6 astados de la ganadería de La Castilleja y que transcurrió sin incidentes pero con gran participación de corredores. Por la noche no se pudieron celebrar los fuegos artificiales por el alto riesgo de incendios.
LA PROCESIÓN
Pero si por algo destacaba la jornada de ayer era por la celebración de la procesión en honor de la patrona de la localidad. Los cirboneros y cirboneras abarrotaron el amplio recinto religioso con una celebración en la que estuvieron presentes las autoridades municipales y miembros del Gobierno de Navarra.
Finalizada la misa, la comparsa de gigantes bailó un vals dentro de la iglesia finalizando con una larga ovación de los feligreses. La imagen de la Virgen de la Paz recorrió las calles del pueblo acompañada de autoridades, la banda municipal de música y la comparsa de gigantes que abría el recorrido procesional. En la plaza del Ayuntamiento, el presidente de la Asociación Juvenil (AJUCI), Marcos Navascués, le impuso a la Virgen de la Paz el pañuelo de fiestas, mientras Yoli Moreno y Rita Cornago entonaban una jota.