La economía vasca cerró junio con un total de 1.002.954 afiliados a la Seguridad Social, marcando un nuevo récord de cotizantes. Sin embargo, la comparativa con el mes anterior muestra que empiezan a notarse los efectos de la ralentización, del menor crecimiento económico, ya que Euskadi solo ganó 368 afiliados en junio, la cifra más baja para ese mes desde 2013. Sin embargo, un dato importante a tener en cuenta es que, echando la vista atrás, precisamente a junio de hace diez años, justo antes del inicio de la recuperación económica tras la crisis económica y financiera mundial que comenzó en 2008, este año hay 127.694 personas más afiliadas a la Seguridad Social que entonces.
Y es que el mercado laboral ha apreciado una importante mejoría. Así, desde 2008, fue perdiendo empleo ininterrumpidamente hasta el inicio de la recuperación que comenzó entre 2013 y 2014, siendo la construcción el sector más afectado, seguido de la industria.
Por ejemplo, Euskadi registró a finales de 2009 un total de 123.100 parados –situando la tasa de desempleo en el 11,75%–, lo que suponía un incremento interanual del 39%. Es más, la tasa de paro llegó a finales de 2013 al 15,76%, una primera e importante diferencia respecto a la situación actual, cuando la tasa de desempleo ronda el 8%, en niveles similares a antes del estallido de la crisis. En cuanto a la afiliación, en junio de 2009 era de 919.640 (83.314 menos que en la actualidad, pero 44.380 más que en el mismo mes de 2013).
Si se miran los datos por sectores, llama la atención el crecimiento de la hostelería, la educación y la sanidad, mientras que desciende la construcción y la industria. Sin embargo, este dato no es exclusivo de Euskadi, ya que en las economías avanzadas, el aumento del empleo en los servicios suele ser consecuencia de la destrucción de puestos de trabajo en el sector industrial.
Evolución
En la construcción hay actualmente casi 25.000 afiliados menos que en 2009 –en junio de este año había 59.000–. Y esta cifra casi llega a los 30.000 en 2013. En industria, la evolución ha sido similar. Ahora cuenta con 175.000 afiliados, más de 26.000 menos que hace 14 años, al comienzo de la crisis. Sin embargo, en 2013, casi llegaron a los 30.000 menos. Queda claro que el sector, sin duda, más afectado por la crisis que estalló en 2008, y que fue destruyendo empleo ininterrumpidamente hasta el inicio de la recuperación entre 2013 y 2014, fue el de la construcción.
Tras quince años de continua generación de empleo, en 2009 el mercado laboral vasco registró un descenso muy notable en sus cifras de ocupación. Las dificultades por las que atravesaba la economía se trasladaron inevitablemente a las cifras de puestos de trabajo, que volvieron a los niveles de 2006. Además, la pérdida de empleo se tradujo en un importante incremento del paro, cuya tasa aumentó hasta situarse por encima del 8%. La fase más dura del ajuste laboral se concentró en los trimestres centrales, para suavizar sus caídas en el tramo final del año.
Todos los sectores, sin excepción, sufrieron los efectos de la crisis. Según las estimaciones de las cuentas económicas, la industria redujo el total de sus efectivos un 6,7%, mientras que la construcción presentó las peores tasas interanuales (-9,9%), como resultado de los problemas padecidos por el sector inmobiliario, que frenó en seco su actividad y no fue capaz de ajustar vía precios la brecha surgida entre la oferta y la demanda de viviendas. Finalmente, los servicios tampoco fueron ajenos a los problemas del conjunto de la economía, aunque su pérdida de empleo, en porcentaje, fue significativamente menor que la de los otros sectores mencionados, y se limitó a un -1,3%. Según destacó entonces el Gobierno vasco, el impulso de la administración a actividades como la educación o los servicios sanitarios sirvieron para suavizar parcialmente la pérdida de empleo en servicios de mercado.
En 2013, la situación era peor. Habían pasado cuatro años desde que se empezó a notar en Euskadi el efecto de la crisis mundial. Según el balance del Gobierno vasco de aquel año, todas y cada una de las ramas de actividad principales siguieron descendiendo, aunque a un menor ritmo que hasta entonces. Ya se empezaba a vislumbrar cierta recuperación. Construcción encabezó el ranking, con un descenso medio anual del 10,8%, aunque se moderó respecto al -12,2% registrado en 2012. No obstante, las caídas eran entonces importantes, dado que la edificación de viviendas y la licitación oficial no acaban de reactivarse. El sector industrial, por su parte, apenas mejoró unas pocas décimas, desde el -4,6% de 2012 al -4,3% de 2013. El que mejor resistió fue el sector servicios, que también perdía empleo aunque en menor medida. De hecho, tan solo perdió puestos de trabajo en 2009, 2012 y 2013.
En la actualidad, en hostelería hay casi 69.000 afiliados, 14.700 más que en el mismo mes de 2009 (+27%) y 13.000 más que en 2013 (+3,25%). El incremento es mayor en sanidad, que cuenta con 112.000 afiliados (30.000 más que en 2009 y 29.000 más que en 2013). En educación también es llamativo el incremento, que con 80.000 afiliados registra 25.000 más que en 2009 y 23.000 más que en 2013. En su balance de los datos de junio, la consejera de Empleo, Idoia Mendia, destacó: “Es el momento de mantener el rumbo que ha hecho posible el mayor éxito en la recuperación y creación de empleo de calidad”. l
Los datos
- Afiliados. La economía vasca cerró junio con un total de 1.002.954 afiliados a la Seguridad Social, 127.694 personas más que en 2013. En cuanto a la afiliación, en junio de 2009 era de 919.640 (83.314 menos que en la actualidad, pero 44.380 más que en 2013).
- Por Sexos. En la actualidad hay 77.266 mujeres más afiliadas a la Seguridad Social que diez años y el aumento es más notable que el de los hombres, que se queda en 50.431.
- Edades. Las cifras también muestran que hay más jóvenes de menos de 25 años trabajando, así como mayores de 64 años, debido al retraso de la jubilación. Por contra, hay menos trabajadores de mediana edad.
- Sectores que crecen. En hostelería hay casi 69.000 afiliados, 14.700 más que en el mismo mes de 2009 (+27%) y 13.000 más que en 2013 (+3,25%). El incremento es mayor en sanidad, que cuenta con 112.000 afiliados (30.000 más que en 2009 y 29.000 más que en 2013). En educación también es llamativo el incremento, que con 80.000 afiliados registra 25.000 más que en 2009 y 23.000 más que en 2013.