La vista oral del juicio que se celebra en la Audiencia de Gipuzkoa llega hoy a su jornada final con el informe de la defensa y el ofrecimiento al acusado de su derecho a ejercer la última palabra, tras lo que el juicio quedará visto para sentencia. Esta semana las partes están presentando sus conclusiones finales y se espera que la defensa pida hoy también como ha hecho durante todo el proceso, la libre absolución del acusado que insiste en su inocencia.
En la jornada de ayer, Mario Díez, el abogado de 14 de las 17 víctimas de Kote Cabezudo, ha asegurado que el "objetivo" del fotógrafo donostiarra "no era hacer fotos" a sus modelos sino "abusar sexualmente" de unas chicas que cuando firmaban un contrato con él "vendían su alma al diablo".
En su informe de conclusiones, el abogado que representa a 16 chicas, ha mantenido su petición de casi 2700 años de prisión para el fotógrafo donostiarra y sostiene que se han probado abusos sexuales y pornografía infantil en los vídeos y fotografías vistas durante el juicio. Asimismo, ha añadido que las víctimas se han sentido desprotegidas porque Cabezudo ya había construido una red de impunidad para protegerse.
Durante tres décadas el fotógrafo ha mantenido un comportamiento similar, según Díaz: hacía firmar el contrato a las modelos, se apropiaba de sus derechos de imagen y después las amenazaba con imágenes explícitas sacadas para conseguir su objetivo real; abusar sexualmente de ellas. "Esas mujeres vivían aterrorizadas", ha dicho, vivían con miedo de que esas imágenes se difundieran en "un entorno en el que todos nos conocemos", ha señalado. "No les quedaba otra opción que soportarlo, porque les podía reventar la vida", ha dicho. En esos vídeos que se han visto durante la vista se confirman muchos de estos abusos, pero la acusación particular dice que fueron muchos más y añade que las mujeres veían a Cabezudo totalmente protegido.
El fotógrafo Kote Cabezudo está acusado de 32 delitos de abuso sexual y pornografía infantil. Entre los testimonios que se han podido escuchar, el de una de las víctimas que acudía al estudio del fotógrafo siendo menor y que afirmó haber sido agredida sexualmente hasta en 150 ocasiones. Su abogado afirma que hasta 18 de estas agresiones están "documentadas fotográfica y videográficamente".
También el Ministerio Público consiedra que ha quedado "totalmente probado" que Cabezudo cometió los delitos de los que se le acusa. De hecho desde que comenzara el proceso hasta hoy ha elevado su petición de pena de cárcel. Pide 250 años de prisión.