Tras la polémica sobre la forma de abordar la derogación de la reforma laboral, finalmente el PSOE consiente que sea Yolanda Díaz, ministra de Trabajo y vicepresidenta segunda, quien lidere la negociación, una concesión con la que Podemos asume que habrá representación de otros ministerios. Por lo tanto, la clave que se presenta a partir de hoy consiste en formular el contenido de la reforma laboral. La pretensión es que una vez se llegue a un acuerdo, se celebren reuniones periódicas de coordinación.
Una metodología que ha gustado a Yolanda Díaz, quien considera que las discrepancias entre los socios eran de contenido, y ahora se podrán aclarar. No obstante, también son alabadas por la parte socialista del Gobierno, de hecho Nadia Calviño, insiste desde la pasada semana en que las diferencias eran de metodología.
La vicepresidenta Yolanda Díaz ha dejado claro por activa y por pasiva que quiere derogar la reforma laboral mientras que la vicepresidenta Nadia Calviño no habla nunca en esos términos. Es más el pasado sábado puso sobre la mesa sus objetivos: la simplificación de contratos, la reducción de la temporalidad, la regulación de las subcontratas y establecer un mecanismo de flexibilización permanente. La duda está en si estos puntos satisfacen o no a la parte morada del Ejecutivo.
Los sindicatos reclaman no revisar lo ya acordado en la mesa de diálogo social, mientras que la patronal dice querer un acuerdo, insiste en no desmontar la reforma laboral, y señala que no dudará si tiene que decir no en la mesa. Además advierte de la reacción que pueda tener Bruselas.
La reunión está fijada a mediodía en Moncloa. Además de las dos Vicepresidentas, acuden al encuentro la ministra de Hacienda y Función Pública, la ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría y el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá.