Y si el miércoles eran dos las vacas que protagonizaban el encierro de Mendigorría al quedarse encerradas en el cajero de La Caixa, este jueves han sido seis las que han requerido los servicios bancarios. Pastores y mozos se han empleado a fondo para sacarlas de la sucursal, pero si bien los animales han entrado con relativa facilidad la salida ha sido complicada porque se han quedado encajonadas.
Ni los tirones de rabo de algunos mozos ni la intervención de los pastores conseguían que el festejo pudiera continuar. Más de cuatro minutos han permanecido los animales en la entidad hasta que un pastor ha abierto la puerta con un palo y las vacas han abandonado su refugio para continuar a la carrera.