Hoy vuelven a casa los 108 niños de Ucrania que han pasado el verano en Euskadi

Han pasado dos meses en la CAV y Navarra jugando, disfrutando y, al menos por este tiempo, lejos de las bombas y la guerra, pero ahora toca volver a casa. Los 108 niños de Ucrania que forman parte del programa de acogida familiar de la Asociación Chernobil Elkartea emprenden hoy el viaje de vuelta. La salida será de forma escalonada. A las 10:00 saldrán los grupos de Bizkaia y Navarra (desde el parking del hotel Ibis Budget Bilbao Arrigorriaga y desde el hotel BED4U de Pamplona, respectivamente). A las 11:00 saldrá el grupo de Araba, en este caso desde el parque comercial Gorbeia. El último grupo en salir será el de Gipuzkoa, que lo hará a las 11:30 desde FICOBA, el recinto ferial de Irun.

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Marian Izagirre, Asociación Chernobil Elkartea: "Que alguien imagine si un niño de 6 a 17 años no merece una noche tranquila"

Iranzu Calvo | OV

Hoy vuelven a casa los 108 niños de Ucrania que han pasado el verano en la CAV y Navarra

En autobús, no en avión

Los 108 niños y niñas tienen un largo viaje por delante. Hace años venían y volvían en avión, pero la invasión rusa de Ucrania mantiene cerrado el espacio aéreo del país, así que el viaje tiene que ser por carretera, en autobús. Si todo va según lo previsto, llegarán el viernes de madrugada. A la duración del viaje se suma las restricciones de electricidad, como nos contaba en Onda Vasca con Txema Gutiérrez la presidenta de la Asociación Chernobil Elkartea, Marian Izagirre: "Una de las dudas es cuánto van a tardar en volver por el pase de la frontera. ¿Quién se imagina un pase de la frontera en el que van uno detrás de otro sin ordenadores, metiendo todos los datos a mano? La electricidad es lo que tiene, es algo que les falta muy a menudo".

Radiación y guerra

Izagirre explica que los programas de acogida han cambiado, se han adaptado a la nueva situación: "La urgencia ya no es sólo la radiación, ahora también es la guerra. Por eso intentamos que salgan más niños, que salgan también en Navidad, hacemos un esfuerzo mayor". Los niños, explica, quieren llevar una vida normal, pese a las circunstancias: "Vienen con más ansiedad. Muchos tienen el padre, el tío o el abuelo en la guerra, luchando. Todo va en contra de su bienestar y su tranquilidad".

"Una noche tranquila"

Los vínculos que se crean en estos programas de acogida son muy fuertes. La propia Izagirre explica: "Para nosotros es uno más. Siempre digo que, desde hace muchos años, tengo una parte de mi familia que vive en Ucrania". La Asociación mantiene la puerta abierta para que todas las familias que quieran se puedan sumar a esta acogida. Los interesados pueden contactar en el 670 41 90 78. Lo que está en juego, aunque parezca poco, es mucho: "Para ellos, pasar un tiempo aquí es saber que vas a poder dormir toda la noche porque no va a haber un ataque sobre el tejado de su casa. Que alguien se imagine si un niño de 6 a 17 años no merece una noche tranquila".