El ministro de Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, ha convocado este miércoles al embajador de Ucrania en el país, Mijailo Yunher, y ha recalcado que la guerra en territorio ucraniano "no es una guerra" de Hungría.
"Es momento de que los líderes ucranianos dejen de insultar a Hungría y tomen nota de la voluntad de su pueblo", ha aseverado el ministro en un comunicado difundido a través de su cuenta de Facebook.
Así, ha matizado que Hungría "ha sido clara desde el principio sobre la guerra en Ucrania" y ha recordado que "condena la agresión militar" al tiempo que defiende "la soberanía ucraniana". "Hemos admitido a los miles de refugiados que huyen para salvar sus vidas", ha dicho.
Hungría prefiere "mantenerse al margen"
No obstante, ha incidido en que "esta no es nuestra guerra", por lo que Hungría "prefiere mantenerse al margen" porque "no tiene nada que ver". En este sentido, ha hecho hincapié en que el Gobierno no está dispuesto a "arriesgar la paz y la seguridad del pueblo húngaro".
"Entendemos que los ucranianos tienen intereses distintos y no vamos a discutir con ellos. Su interés es el de Ucrania y el nuestro es el de Hungría", ha aseverado antes de condenar los comentarios sobre una "supuesta complicidad" de Budapest con la guerra.
Szijjarto ha explicado que es por ello que las autoridades han decidido convocar al embajador ucraniano, para "dejar claro de manera comprensible todo esto".