Iberdrola inaugura su proyecto "más difícil de ingeniería": el parque eólico marino de Saint-Brieuc

Iberdrola ha inaugurado hoy en Francia el parque eólico marino de Saint-Brieuc, el proyecto “más difícil” que ha tenido nunca desde el punto de vista de ingeniería. Prueba de ello es que comenzó a diseñar su instalación en 2012 y ha entrado en plena operación en 2024 tras tres años de construcción. El parque tiene una capacidad de producción de casi dos millones de megavatios hora (MWh) al año y dará servicio a cerca de un millón de personas en esta región francesa. Y es que Bretaña es una tierra de fuertes vientos y grandes mareas, lo que hace de ella un lugar privilegiado para explotar el potencial energético.

"(Este proyecto) sienta las bases del sector eólico marino en Francia y demuestra el potencial de esta tecnología para impulsar la autonomía energética, la competitividad y la reindustrialización de Europa, contribuyendo además a los objetivos climáticos, en línea con el informe Draghi", ha selañado el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, duranate la inauguración del parque, que cuenta ya con sus 62 turbinas operativas desde mayo.

Fabricadas por Siemens Gamesa, cuentan con 8 MW de potencia cada una, lo que las convierte en las más potentes instaladas en Francia hasta la fecha. Para su fabricación, se llevó a cabo la creación de una nueva fábrica en Le Havre, también en Francia, que ha dado trabajo a 1.000 personas. Además, el fabricante vasco de aerogeneradores se encargará del mantenimiento del parque eólico durante diez años, mientras que el barco SOV (Embarcación de Servicios de Operación en sus siglas en inglés), fabricado por el astillero Balenciaga, se encargará de dar soporte técnico a la instalación.

“(La descarbonización) es mucho más que hacer energía verde, es hacer industria, es hacer empleo y empleo de calidad, empleo de futuro y autosuficiencia para Europa”, ha señalado Galán, quien ha puesto en valor que en la puesta en marcha del parque eólico de Saint-Brieuc han participado cerca de 150 empresas europeas, entre las que destaca otra vasca, Haizea Wind, encargada de la fabricación de las torres.

Sain-Brieuc es el cuarto parque eólico marino en operación de Ibedrola, tras los de West of Duddon Sand (del Reino Unido), ubicado en el mar de Irlanda, Wikinger (Alemania), en el mar Báltico, y East Angli One (Reino Unido), en el mar del Norte y uno de los parques eólicos marinos más grandes de mundo. En cambio, Galán ve muy lejana la posibilidad de desarrollar parques eólicos marinos en el Estado. "España tiene un problema: el suelo marino es muy profundo", ha señalado. Según ha explicado, los parques marinos en el Estado deben ser flotantes y, para eso, se necesita una tecnología que aún está en pruebas y que "fácilmente" puede ser "tres o cuatro veces más cara" que la necesaria para hacer parques con anclajes fijos al lecho marino, tal y como se construyen en la actualidad. Aunque "estamos trabajando en ello", desde el punto de vista competitivo "es complicado" y "no es una tecnología de hoy para mañana", ha reconocido Sánchez Galán, que por el momento apuesta más por "agotar los recursos de lo que tienes más fácil".

Qatar Investment

Sobre su principal accionista, el fondo soberano catarí Qatar Investment Authority (QIA), ha asegurado desconocer "por completo" si quiere aumentar su participación en la eléctrica –que actualmente controla el 8,7% del capital–, tal y como se ha publicado. Lo que sí analizan ambas partes es aliarse como socios para invertir en proyectos, tal y como ya hacen en Estados Undos, y como también hace la eléctrica con Emiratos Árabes en diversas iniciativas fuera del Estado. "Son socios nuestros en otros temas, en Estados Unidos, y estamos mirando para ser socios en otros sitios", ha dicho el directivo, que, sin embargo, ha insistido en que sobre su supuesto interés en elevar su participación "no han dicho nada". "Tenemos la suerte de contar con los mayores fondos soberanos del mundo, tanto como inversores en Iberdrola como de partners (socios)", entre ellos también Masdar (Abu Dhabi) o Norges (Noruega), que, según Sánchez Galán, son "socios serios, sólidos y con una trayectoria de cumplir lo que dicen".