La segunda jornada del juicio, este martes, contra el presunto violador de Gipuzkoa deja la práctica confirmación de que el acusado se trata de un depredador sexual. Al menos así se desprende de la declaración de los agentes de la Ertzaintza que hallaron en su ordenador la grabación de al menos otra decena de violaciones . "Identificamos a cuatro víctimas más, las cuales habían sufrido varias agresiones. Una diez u once agresiones", detallaba uno de los ertzainas. A lo que su compañera añadía que "poseía fotografías y vídeos en los que diferentes mujeres eran víctimas de agresiones sexuales estando inconscientes". Además, detallaban que algunos vídeos estaban editados con música y texto y que uno habría sido enviado desde el ordenador personal del acusado a la propia víctima.
Estas nuevas violaciones, añadían en su declaración "no habrían sido denunciadas". A preguntas de los abogados, los agentes de la Ertzaintza detallaban que a partir de 2015 el modus operandi del acusado parecía haber cambiado, dejando de atacar a sus víctimas de forma casual en la calle (como hizo en Lasarte-Oria) y pasando a seleccionarlas previamente "entre familiares de sus compañeros de trabajo". En el caso que se juzga esta semana, la Ertzaintza ha confirmado mediante la señal de su teléfono móvil que el hombre estuvo aquella noche en Lasarte-Oria. En el lugar de la agresión se encontraron un calcetín y una copa de un sujetador impregnados con cloroformo.
Puedes escuchar parte de la declaración de los agentes de la Ertzaintza en el audio.
Hoy, miércoles, el juicio quedará visto para sentencia. Se espera la comparecencia del forense aportado por la defensa y la lectura de conclusiones.
En esta causa que se juzga en la Audiencia Provincial de Gipuzkoa, el acusado se enfrenta a penas de hasta 12 años de cárcel por la presunta violación de una joven de 21 años en Lasarte-Oria, la madrugada de Año Nuevo de 2015