La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha asegurado este martes que su objetivo es que en los presupuestos generales del Estado para 2023 se duplique la actual partida de 140 millones de euros destinada a financiar el Pacto de Estado contra la Violencia de Género.
En rueda de prensa en el Congreso tras reunirse con la Mesa y los portavoces de la Comisión de seguimiento y evaluación de los acuerdos del citado pacto, Montero ha recordado que se ha ampliado mucho el mapa de las víctima de la violencia machista, al incluirse, junto a las mujeres maltratadas por su pareja o expareja, a las víctimas de la violencia sexual, la digital o la vicaria.
"Si queremos doblar el número de víctimas a las que atiende el Estado, tenemos que ser capaces de doblar el compromiso presupuestario que queremos para poner en marcha todos estos servicios", ha manifestado.
Y se ha mostrado confiada en lograrlo, gracias al "compromiso feminista" del Gobierno español y también de la mayoría del Parlamento.
A los portavoces de la Comisión con los que se ha reunido esta tarde en el Congreso les ha urgido también a actualizar el Pacto de Estado.
Un compromiso de 1.000 millones de euros en cinco años
Tras largas negociaciones, en septiembre de 2017 se aprobaron sendos dictámenes en el Congreso y en el Senado que conformaron el Pacto de Estado contra la Violencia de Género, un compendio de cerca de 300 medidas en todos los ámbitos, desde la justicia a los servicios sociales, acompañado del compromiso de destinar 1.000 millones de euros en cinco años.
Su vigencia concluye este mes, pero el 25 de noviembre del año pasado todos los grupos menos Vox sellaron un pacto para renovarlo, hacerlo permanente y blindar su financiación pública.
Montero ha insistido en la necesidad también de actualizarlo, de revisar su contenido.
Además de la reunión celebrada hoy, en la que han participado junto a Montero la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez, y la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, el Ministerio está manteniendo reuniones con los grupos parlamentarios para impulsar las "leyes feministas" en trámite en el Congreso.
Montero ha hecho referencia en concreto a la ley trans y a la reforma del aborto, que están en fase de enmiendas, "orgullosa" de que "la mayoría feminista" de la Cámara vaya sacarlas adelante y hacer que ésta sea "una legislatura de avances decisivos en los derechos de las mujeres".
"Es un orgullo para el país contar con un gobierno comprometido y una mayoría feminista consciente de que en los momentos de dificultad es cuando más urgente es proteger y ampliar derechos", ha señalado Montero con la mirada puesta en la amenaza al aborto en otros países o en el aumento de la LGTBI-fobia.