Un juez ha citado a declarar como investigados a tres escopeteros de los Mossos d'Esquadra a raíz de una querella presentada por un joven manifestante que perdió un testículo por el disparo de una pelota de foam, en una protesta contra el Consejo de Ministros que se celebró en 2018 en Barcelona.
En una providencia, el titular del juzgado de instrucción número 12 de Barcelona, Sergio Escalona, cita a declarar el próximo lunes a los tres escopeteros, una diligencia con la que pretende aclarar quién fue el agente que causó las lesiones al manifestante.
Hasta ahora, en la causa ha declarado como testigo el manifestante herido y los Mossos d'Esquadra han aportado grabaciones de la intervención policial en la que el joven resultó herido, además de identificar a cinco escopeteros que actuaron en la zona, aunque no han podido concretar cuál de ellos fue el autor de los disparos.
La querella presentada por el manifestante, a través de la entidad pro derechos humanos Iridia, sostiene que fue un agente de un cordón policial de Mossos d'Esquadra situado en calle Fusteria de Barcelona el que disparó el proyectil de foam que impactó en su testículo derecho, que tuvo que ser amputado por las lesiones que presentaba.
Según la querella, la policía disparó hacia los concentrados con proyectiles de precisión en un momento en que ni el manifestante ni "ninguna persona de su entorno inmediato estaba provocando ninguna situación de riesgo. Es más, su zona estaba muy tranquila y él acababa de llegar al lugar de los hecho", añade.
En un comunicado, Iridia ha destacado que uno de los agentes que actuaron en la zona no iba identificado con el número de operativo policial (NOP), lo que incumple una instrucción vigente aprobada por el Departamento de Interior.
Para la asociación, este nuevo caso de heridas graves provocadas por un proyectil de foam demuestra que se trata de una munición "muy lesiva" y que "los mecanismos de control y trazabilidad no funcionan", lo que, añade, "impide la rendición de cuentas".