“Incluso alguien callado como yo termina sacando sus emociones en el Buesa Arena”

Darius Thompson (Murfreesboro, 1995) se ha convertido desde su fichaje en verano en el principal director de orquesta azulgrana, un base cerebral y muy regular que se ha adaptado a las mil maravillas a la Euroliga y que hace fluir el juego cuando el balón pasa por sus manos. En un momento complicado tanto para el equipo como para él por haberse convertido en el único base puro disponible tras la suspensión de Henry, Thompson analiza con DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA la actualidad del conjunto azulgrana y sus primeros meses en Vitoria-Gasteiz.

¿Qué balance hace de su etapa como baskonista hasta ahora? 

Ha sido genial. Hasta el momento he disfrutado mucho de mi tiempo en el Baskonia y creo que tomé la mejor decisión posible al venir aquí. Ha sido positivo para mí y espero que también para el equipo, estoy feliz en Vitoria.

¿Cómo valora su rendimiento en su primera experiencia en ACB y en Euroliga?

Creo que lo estoy haciendo bien. No suelo juzgar mi propio rendimiento, me baso en los éxitos y los resultados del equipo en su conjunto para valorar si estoy haciéndolo bien, de nada sirve tener grandes números si no ganamos. En mi opinión, estamos completando una temporada bastante buena en general y ojalá podamos seguir mejorando y haciendo bien las cosas.

¿Por qué tardó tanto en llegar a la Euroliga? Ha demostrado estar totalmente preparado. 

Tal vez se deba simplemente a que la gente no creía en mí, o a que al haber empezado en un nivel bastante bajo en Europa he tenido que hacer mi propio camino poco a poco hasta la cima. Personalmente, yo sentía que estaba preparado para competir en la Euroliga desde el principio, pero a veces no queda otra que esperar a que se presente la oportunidad. Después de rendir en torneos con mayor visibilidad como la Eurocup o la Basketball Champions League pensaron que ya estaba preparado.

Los resultados no están acompañando al equipo en enero, ¿a qué cree que se debe? 

Cuando completas un mes espectacular como el que tuvimos en diciembre, es normal que se espere mucho de nosotros, pero es muy difícil mantener ese nivel toda la temporada, sobretodo cuando juegas dos competiciones tan exigentes como la ACB y la Euroliga en las que necesitas dar el máximo en cada partido. También hay otros equipos de Euroliga que han pasado por malos momentos y siempre van a haber altibajos. Ahora estamos pasando por uno de esos momentos bajos y tenemos que mantenernos unidos, seguir creyendo los unos en los otros y pelear para salir de él. Yo creo en nosotros, cuando se empiecen a ver los resultados del trabajo volveremos al nivel de antes.

¿Está afectando al vestuario todo lo que ha sucedido con Henry?

Nosotros intentamos mantenernos al margen, como jugadores no hay mucho que podamos hacer al respecto. No sabemos qué es exactamente lo que ha pasado, así que ahora simplemente estamos a la espera. En otros momentos de la temporada ha habido jugadores lesionados y hemos tenido que seguir compitiendo sin ellos. Hemos tenido distintos grupos a lo largo del curso y si ahora él ya no está, este es el que tenemos y hay que seguir yendo a entrenar y luchar para ganar cada partido, eso no cambia.

En las últimas semanas parece que si Howard no anota 20 puntos, al equipo le cuesta ganar. ¿Cree que dependen demasiado de él?

Yo no diría eso. Sí que es cierto que en este momento en el que estamos perdiendo partidos nos ha salvado alguna victoria, pero ha habido encuentros en los que él no ha estado y hemos jugado a un grandísimo nivel, como cuando ganamos al Real Madrid en la ACB, por ejemplo. Sería simplista decir que Howard tiene que irse más allá de los 20 puntos para que podamos ganar. Si lo hace, obviamente ayuda, pero creo que somos suficientemente soberanos como equipo para conseguir triunfos con o sin él.

¿Está resultando exigente ser el único base del equipo desde que Henry fue apartado? 

Para mí está siendo parecido. De hecho mi cuota de minutos no ha aumentado, sobretodo en los partidos en los que he tenido problemas con las faltas. Yo solo intento ayudar a que el equipo gane, si para eso tengo que hacer el esfuerzo de estar más minutos sobre la cancha, lo haré.

¿Resulta difícil defender sabiendo que no hay un base de repuesto y que no puede ser eliminado?

Creo que en estos momentos tengo que ser más inteligente con las faltas para poder mantenerme más tiempo sobre el parqué. De todas formas, hay otros jugadores con la habilidad para ejercer de base, aunque se sientan más cómodos en el puesto de escolta. Ahora tenemos que ser capaces de cubrir la pérdida de Henry como equipo, no es algo que pueda hacer yo solo.

Ahora que conoce mejor la plantilla, ¿cuáles cree que deben ser los objetivos para esta temporada? 

No lo sé, no soy de los que les gusta mirar al futuro o marcarse metas. El objetivo principal tiene que ser competir en cada partido, sin importar el nivel del rival o el escudo que lleve. Si damos lo mejor de nosotros, creo que somos capaces de ganar casi todos los encuentros.

Esta semana se ha sabido que el Joventut será el rival del Baskonia en la Copa, ¿está contento con el sorteo?

Cualquier rival iba a ser complicado, todos lo son en la ACB. Además vamos a tener la dificultad añadida de jugar contra el anfitrión, en Badalona, pero a mí personalmente eso es algo que me motiva.

¿Está la plantilla ilusionada con el torneo?

Sí, desde luego. Cuando llegamos en verano nos dejaron claro que era extremadamente importante estar en la Copa, algo que no se consiguió la pasada temporada, y ha sido una alegría obtener el billete como cabezas de serie. Me encantaría poder devolver al Baskonia a una final de Copa del Rey, vamos a salir a competir y a ver hasta dónde podemos llegar.

Hablemos un poco de usted, ¿cómo ha sido su adaptación al Baskonia? 

Ha sido un proceso de transición muy suave y sencillo, la verdad. Yo veo al Baskonia como un club que da oportunidades a los jugadores aunque no tengan mucha experiencia en la Euroliga, y no solo hablo de mí, hay muchos compañeros en la plantilla que no habían jugado al máximo nivel europeo y se les ha dado la oportunidad de salir ahí fuera y ser ellos mismos.

Cada año ha ido dando pasos adelante en su carrera. ¿Es la NBA el siguiente que le gustaría dar? 

Desde luego, como jugador siempre quieres jugar al máximo nivel y tras haber pasado por la BCL, la Eurocup y ahora la Euroliga el siguiente escalón es la NBA. Sin embargo, ahora solo estoy centrado en dar lo mejor de mí, sacar el máximo partido a la experiencia en el Baskonia y ganar encuentros para el club. Si llega la oportunidad, perfecto; si no, seguiré trabajando e intentando mejorar, que es lo que está en mi mano.

Le van a llover ofertas en verano si mantiene el nivel... 

No pienso en eso, si es así ya se preocupará mi agente de lidiar con ello (risas). Ahora yo solo quiero jugar y estar liberado. Si un jugador empieza a darle muchas vueltas a su futuro, corre el riesgo de que termine afectando su rendimiento.

¿Le agradaría quedarse en el Baskonia si no llega una oportunidad irrechazable? 

Como le decía, estoy encantado en el Baskonia. El equipo y el cuerpo técnico me han acogido con los brazos abiertos, así que estaría feliz de continuar. Me parece que es una buena situación para mí.

¿Hay algún aspecto de su juego en el que esté trabajando ahora o que le gustaría mejorar? 

Todos. Intento ser un jugador lo más completo posible. Ahora tal vez me esté centrando más en ser un poco más agresivo a la hora de anotar y en dejar a mis compañeros en mejores situaciones cuando les asisto. Suelo verme a mí mismo en vídeo para fijarme en qué cosas hago bien y en qué puedo mejorar, y a partir de ahí decido qué trabajar. No me centro en un área en concreto.

Cuando juega, es la prolongación de Peñarroya en la cancha, siempre hablando con él, marcando jugadas... ¿Cómo es su relación con el técnico? 

Es uno de los mejores entrenadores que he tenido a lo largo de mi carrera, eso sin duda. Me da libertad para ser yo mismo y eso ayuda mucho a un jugador. Cuando puedes competir sin estar pensando en si estás agradando o no al entrenador y solo te centras en disfrutar, ahí es cuando sacas tu mejor baloncesto. El hecho de que él haya sido jugador también ayuda, a veces me pide algo, hago exactamente eso y funciona a la perfección. Vemos el baloncesto de la misma manera y siempre que tengo alguna duda puedo preguntarle y contar con él.

Usted no es un jugador muy expresivo, pero en el Buesa se le han visto algunas celebraciones más efusivas. ¿Qué me puede decir de su conexión con la afición y el ambiente en el pabellón?

Los aficionados del Baskonia son fantásticos. Cuando el pabellón está lleno y todo el mundo está implicado, incluso una persona más callada como yo termina sacando sus emociones. En esos partidos en los que estamos por debajo en el marcador, la grada aprieta y Howard anota un par de triples seguidos o Costello hace un mate espectacular todos nos venimos arriba. Disfrutamos mucho jugando en el Buesa Arena, la experiencia en los dos partidos en los que se llenó fue increíble, ojalá se repita.