Las acciones de Inditex lideraban las caídas del Ibex 35 pasadas las 13.00 horas, con un descenso cercano al 3%, en el último día de Pablo Isla como presidente de la compañía, y valían menos que las de Iberdrola a media sesión, que marca una capitalización bursátil de más de 64.500 millones de euros, por encima de los 63.080 millones de la firma gallega.
En concreto, las acciones de la compañía fundada por Amancio Ortega cedían un 2,8%, hasta situarse en un precio de 20,24 euros, mientras que las acciones de Iberdrola subían un 0,72% pasadas las 13.00 horas, hasta los 10,03 euros.
De esta forma, los títulos de Inditex se situaban por debajo de los 24,61 euros que marcaban el pasado 23 de febrero, cuando se inició la guerra de Ucrania, con lo que se han dejado casi un 18% desde esa fecha.
Asimismo, han perdido casi un 30% en lo que va de año y un 27% respecto al 30 de noviembre del pasado ejercicio, fecha en la que la compañía anunció el relevo en la presidencia.
De hecho, Marta Ortega cogerá este viernes el timón de Inditex con casi 6.500 tiendas repartidas por el mundo, unos beneficios récord y su apuesta por mantener el modelo de negocio, cerrándose así la etapa de Pablo Isla, quien dejará la presidencia ese día tras 17 años en la compañía, cuya valoración bursátil ha incrementado en unos 52.000 millones desde 2005.
Nueva era de la mano de Marta Ortega
Así, la hija de Amancio Ortega emprenderá una nueva era como presidenta no ejecutiva de Inditex, en la que estará acompañada por el consejero delegado, Óscar García Maceiras, quien lleva ya en el cargo desde el pasado mes de noviembre, fecha en la que se anunciaron los cambios en la dirección de la firma.
Marta Ortega ha desarrollado su actividad en distintas áreas del grupo durante los últimos quince años y, en particular, ha dirigido el reforzamiento de la imagen de marca y propuesta de moda de Zara, área que seguirá supervisando.
Bajo su liderazgo se han materializado campañas con los más reputados creativos del sector como Steven Meisel, Fabien Baron, Karl Templer o Luca Guadagnino, así como el lanzamiento de nuevas colecciones 'premium', incluyendo Zara SRPLS y Charlotte Gainsbourg by Zara.
"Estamos enormemente agradecidos a Pablo Isla por su extraordinario trabajo y dedicación durante todos estos años. Me gustaría destacar su inmensa contribución, no solo a nuestro grupo, sino también a la industria de la moda en general", subrayó Marta Ortega tras ser nombrada presidenta.
"He vivido esta empresa desde mi infancia y he aprendido de todos los grandes profesionales con los que he trabajado durante los últimos quince años. Siempre he dicho que dedicaría mi vida a desarrollar el legado de mis padres, mirando al futuro pero aprendiendo del pasado y al servicio de la compañía, nuestros accionistas y nuestros clientes, en el lugar donde se considere que soy más necesaria", afirmó.
"Me siento profundamente honrada y comprometida por la confianza que se ha depositado en mí y enormemente ilusionada por el futuro que entre todos vamos a acometer", añadió.
Conocimiento del negocio y del grupo Inditex
Marta Ortega, que cobrará un millón de euros anual por sus funciones al frente de la compañía, concretamente, 900.000 euros como presidenta del consejo de administración, y otros 100.000 en calidad de consejera, tendrá bajo su responsabilidad directa las áreas de auditoría interna, secretaría general y del consejo y comunicación.
La compañía ha destacado el valor intrínseco de la nueva presidenta "por su conocimiento del negocio retail en el sector de la moda y del grupo Inditex, donde ha desatollado distintos roles y funciones y su importancia desde una perspectiva institucional".
Pocos días antes de asumir la presidencia, el Grupo Pontegadea, que reúne todas las sociedades de cartera propiedad de Amancio Ortega, sus filiales dedicadas al negocio inmobiliario y otras participaciones de carácter financiero, nombró a su hija nueva consejera de la entidad y también de su filial en Reino Unido.
En general, de cara al futuro, al margen del impacto de la guerra de Ucrania en sus cuentas y su apuesta por Estados Unidos, Inditex espera un crecimiento selectivo del espacio comercial bruto en los próximos años, con tiendas muy diferenciadas, totalmente integradas, digitales y sostenibles.