Seis especialidades concentran el 59% de las listas de espera del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea (SNS-O): Otorrino, Oftalmología, Cardiología, Traumatología, Rehabilitación y Raquis. Ahora, para detectar y establecer unos criterios de priorización, reorganización y derivación, Salud ha creado cinco grupos de trabajo –de las cinco primeras especialidades y en breve se pondrá en marcha el sexto, de Raquis–, que van a estudiar una muestra representativa de los volantes de derivación para analizar la casuística y tipología, con el fin de plantear recomendaciones. La primera fase de trabajo de campo y prospección de estos grupos –compuestos por un profesional médico de la citada especialidad, otro de Atención Primaria y uno o dos técnicos en gestión– estará para noviembre.
Así lo ha indicado este martes la consejera Santos Induráin, en una comparencia a petición de Izquierda-Ezkerra para informar sobre las listas de espera y las medidas para revertir su aumento. Una comisión en la que ha expresado su confianza en que “las listas y tiempos de espera retomen pronto la tendencia limitada pero sostenida a la baja con la que transitamos el primer semestre de 2022”. No obstante, ha adelantado que septiembre “puede ser aún un mes de transición”.
Preocupación
Tras detallar que en agosto se alcanzaron los 61.105 y 7.334 pacientes esperando una primera consulta u operación, respectivamente, ha reconocido que “son datos elevados pero es esperable que próximamente, sobre todo cuando notemos los efectos de la recuperación de la actividad y los planes específicos por especialidades, además de otras medidas, tengan su efecto”. Asimismo, ha expuesto que “sería muy reduccionista centrar el análisis en estas macrocifras” y ha abogado por “completar la visión con el indicador tiempos de espera: quiénes esperan, cuánto y para qué”.
En esta línea, ha afirmado que “pese a ser un año complejo y siendo tiempos elevados, entre principios de 2022 y este mes de agosto, la espera media para primeras consultas ha bajado de 113 días a 101 mientras que en operaciones quirúrgicas este indicador se mantiene en unos parámetros histórica y comparativamente menos elevados”.
En su intervención, la consejera apuntó al efecto de la estacionalidad –el verano y las necesarias vacaciones del personal– en la estadística, si bien ha reconodio que su impacto es “menos importante que otros factores más estructurales, como el déficit de profesionales y el envejecimiento de la población a atender”. De hecho, ha dicho que actualmente “el sistema público atiende a más personas y con más necesidades o demandas que nunca”.
En esta línea, ha mencionado que el hecho de que “hoy en día los sanitarios sean un bien objetivo escaso es un hándicap añadido difícil de manejar a corto plazo”, pero han adoptado medidas “para revertir esta situación, sobre todo formando más profesionales (Medicina en la UPNA, más plazas MIR...)”, si bien “los frutos no llegarán a corto plazo”. En definitiva, ha considerado que su “reto inmediato es pasar del modo contención propio de un periodo pandémico excepcional, al modo reducción”, sentando las bases para que las listas de espera “no vuelvan a crecer más adelante”. No obstante, ha asegurado que “en todo momento, Osasunbidea ha protegido los procesos y atenciones urgentes y no demorables, como son los relativos a Oncología”.
El director de Osasunbidea: "Queremos una plantilla estable"
La consejera de Salud ha acudido al Parlamento acompañada del director gerente del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea, Gregorio Achutegui, y de Antonio López, subdirector de conciertos y prestaciones. Achutegui ha considerado necesario “una estrategia integral, incluida la legislativa, para orientar el servicio hacia las necesidades de futuro” y ha recordado, al respecto, que el sistema sanitario público “es un sistema grande que no se mueve fácilmente y tiene que ir haciendo las cosas poco a poco, pero con cierta antelación”. Además, ha manifestado que “queremos una plantilla estable”, así como “reducir al mínimo la temporalidad en las contrataciones”.
En su intervención, Induráin ha señalado que “el porcentaje de personas en espera con cita ha mejorado también desde diciembre –de 2021– hasta junio e incluso en julio y agosto fue superior al dato de diciembre: actualmente casi una de cada tres tienen ya una fecha para su consulta cuando el año pasado se cerró con un 23%”.
En cuanto a la lista de espera quirúrgica, ha indicado que Navarra está “entre las comunidades con menores listas y tiempos de espera”. Ha explicado que “además del gran esfuerzo por aumentar la actividad en horario ordinario, se ha incrementado la actividad en jornada extraordinaria cuando no es posible hacerla con personal contratado en jornada normal. Son los llamados PLES (Plan de Listas de Espera), que se están intensificando tras el periodo estival” y cuyos efectos se notarán “en breve”. En concreto, para lo que queda de año hay PLES en marcha para consultas de Cardiología, Traumatología, Rehabilitación, Oftalmología, Oncología Radioterápica, Cirugía General, Urología, Geriatría, Digestivo, Otorrino...