Cinco décadas en rojo y blanco. Cinco décadas con el Athletic que han sido recogidas en una insignia de oro junto a un cuadro conmemorativo de la efeméride con la solicitud de inscripción y la primera ficha de socio de cada uno de ellos. El presidente del Athletic, Aitor Elizegi, acompañado por varios miembros de la Junta Directiva, encabezó este jueves este esperado homenaje anual en San Mamés.
Los 107 socios y socias citados para el acto, acompañados por sus familiares, pudieron disfrutar de un acto sencillo y emocionante, que a más de uno les recordaba seguro el aroma de los grandes días de fútbol que se vivían por aquel entonces, cuando decidieron unirse al Club.
El aforo completo, muy pocos se perdieron la cita. Los únicos, los ya fallecidos pero allí estuvieron en su nombre sus hijos y nietos para participar en este homenaje en La Catedral y recoger de mano de Elizegi su insignia conmemorativa y la solicitud de inscripción y la primera ficha de socio enmarcada. Después, las fotos de familia, como en la bodas, eso sí, con la bandera del Athletic.
EL ATHLETIC DE 1971
Y es que se las prometía felices el Athletic en 1971 cuando comenzó enero con 4 victorias seguidas. Un postrero gol de Félix Zubiaga en el Camp Nou dio paso a una racha que aupó a los leones a puestos cabeceros. Racha que terminó jornadas después en la Nova Creu Alta.
Después, los pupilos de Ronnie Allen ya no lucieron con tanta regularidad, pero fueron capaces de terminar la temporada en puestos europeos. La 71-72, sin embargo, empezó como el rosario de la aurora, con cuatro derrotas seguidas de saque y sólo una victoria hasta mediados de noviembre. Una situación crítica, aumentada por la eliminación europea ante el modesto e innombrable Eintrach Braunschweig, a la que los chicos de Salvador Artigas ya le fueron dando la vuelta sobre todo tras otra victoria balsámica en el Camp Nou con un gol de Fidel Uriarte.