La empresa Intermalta, con sede en San Adrián, ha instalado más de 2.000 placas solares con el objetivo de cubrir una parte de sus necesidades de energía y dentro de sus apuestas por un desarrollo sostenible. La firma, dedicada a la producción de malta para la elaboración de cerveza, inauguró este parque el pasado 30 de junio en el que, aseguran, “fue un evento en el que tuvimos la oportunidad de recordar a los colaboradores, proveedores y clientes de la empresa los desafíos medioambientales a los que nos enfrentamos a diario y para sensibilizarlos una vez más sobre cuestiones energéticas”.
Esta iniciativa, desvelan, pone a disposición de la fábrica 12.000 m2 dedicados la generación de energía renovable, lo que supone aproximadamente un 12% de las necesidades eléctricas anuales de la maltera. Se estima también que supondrá una reducción de emisiones de 685 toneladas de CO₂/año.
“Este proyecto fotovoltaico es el primero de una serie de iniciativas alineadas con nuestros objetivos de desarrollo sostenible y vamos a seguir invirtiendo en los próximos años en proyectos de autoconsumo de energía verde en todos nuestros centros productivos”, aseguraba Carlos Álvarez, director general, mientras que para Javier Iriarte, director de operaciones e industrial, “los proyectos de autoconsumo y generación energética no son nuevos para Intermalta. Ahora mismo es el momento idóneo para evitar consumos de energía del exterior y de tener menos dependencia de terceros, debido a la situación en la que están ahora mismo los mercados, y de favorecer el desarrollo medioambiental con energías renovables”.
El proyecto cuenta con un total de 2.092 paneles solares “lo que, para hacernos una idea del alcance, supondría el abastecimiento completo de 525 hogares de forma anual”, reiteraban desde la firma.
Esta inversión, concluían, se enmarca en el plan de Responsabilidad Social Corporativa (RSC).