El pasado 9 de marzo fueron intervenidos en el aeropuerto de Bilbao 38 caracoles gigantes vivos. La Sección Fiscal y de Fronteras del aeropuerto de Bilbao localizaron esta especie invasora en el equipaje facturado de una pasajera procedente de Nigeria. La mujer ha sido denunciada por una infracción a la Ley 33/2015 por introducir especies exóticas invasoras preocupantes para la Unión Europea sin autorización administrativa.
En uno de los controles de equipajes, los guardias civiles observaron en el interior de la maleta facturada de una viajera, un saco que contenía 38 caracoles gigantes africanos, los cuales estaban vivos y con un tamaño medio de 10 centímetros cada uno, arrojando un peso total de 5.300 gramos.
Los agentes procedieron inmediatamente a su aprehensión, ya que supuestamente pertenecían a la especie “Achatina Fulica” considerada una de las peores plagas de caracoles a nivel mundial. Pueden transmitir parásitos peligrosos para la salud humana y por su alta voracidad, producen un desequilibrio ecológico.