El Ejército de Israel ha asegurado haber bombardeado la vivienda del líder del brazo político del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), Ismail Haniye, en el campamento de refugiados de Al Shati, situado en la Franja de Gaza, si bien el alto cargo del grupo islamista reside en Qatar.
Así, ha detallado en un comunicado publicado en su página web que "aviones de guerra han atacado la casa de Ismail Haniye" y ha destacado que la vivienda "era usada como infraestructura terrorista, entre otras cosas, para reuniones de altos cargos de la organización".
Asalto del puerto de Gaza
Por otro lado, Israel sostiene haberse hecho con el "control operativo" del puerto de Gaza, situado en el norte de la Franja. Así, ha manifestado que las tropas israelíes tomaron "durante los últimos días" estas instalaciones, de importancia clave, y ha agregado que, en este caso, el grupo islamista palestino lo utilizaba "como un centro de entrenamiento para sus fuerzas" y para "ordenar y llevar a cabo ataques navales.
"Bajo la cobertura de un puerto naval civil, Hamás aprovechó el lugar para entrenar y llevar a cabo actos de terrorismo, usando embarcaciones civiles y de la Policía Naval de Gaza", ha recalcado, antes de especificar que "las fuerzas eliminaron a diez terroristas y limpiaron todos los edificios en la zona".
Derribo de monumentos
Por otra parte, el Ejército de Israel ha confirmado el derribo del monumento erigido en el puerto de Gaza para conmemorar a las víctimas del asalto llevado a cabo en 2010 por la Armada israelí al buque 'Mavi Marmara', parte de la Flotilla de la Libertad, que pretendía romper el bloqueo naval a Gaza.
"El monumento glorificando los sucesos del 'Mavi Marmara' ha sido derribado. Algunos de los militares que participaron en la toma del puerto también combatieron en el 'Mavi Marmara'", ha destacado el Ejército. El asalto al buque se saldó con la muerte de diez activistas turcos, lo que llevó a Ankara a romper sus lazos con Tel Aviv.
El Hospital Al Shifa
El hospital Al Shifa, el más importante de la Franja de Gaza, ha quedado totalmente incomunicado, denunció este jueves el Ministerio de Sanidad del enclave palestino, un día después de que el Ejército de Israel hiciera una incursión al interior del colapsado centro médico, cuando aún albergaba unos 3.000 civiles.
"La comunicación está interrumpida desde esta mañana con todos los funcionarios, médicos y presentes en el hospital Al Shifa", indicó en un comunicado el Ministerio de Sanidad, controlado por Hamás, mientras el Ejército israelí aseguró hoy mediante un portavoz que sus tropas "continúan haciendo búsquedas en el hospital".
Más de 11.500 palestinos muertos
Las autoridades de la Franja de Gaza, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han elevado este jueves a 11.500 los palestinos muertos a causa de la ofensiva israelí contra el enclave, incluidos 4.710 niños, antes de indicar que otras 3.460 personas han sido dadas por desaparecidas bajo los escombros.
La oficina de prensa del gobierno gazatí ha señalado en un comunicado que entre los desaparecidos hay 1.770 niños, al tiempo que ha cifrado en 29.800 el número de heridos. "Más del 70% de las víctimas son niños y mujeres", ha denunciado.
Asimismo, ha indicado que entre los muertos hay 200 trabajadores sanitarios y 51 periodistas, al tiempo que ha subrayado que los ataques israelíes han causado daños materiales en 95 edificios oficiales y 255 escuelas, incluidas más de 60 que han quedado fuera de servicio.
Crímenes de guerra
En este sentido, ha tildado de "crimen histórico" el asalto perpetrado por el Ejército de Israel contra el Hospital Al Shifa, el principal centro médico en Gaza, y ha manifestado que "ha demolido la pared del hospital", tras lo que cientos de soldados y vehículos blindados han entrado en las instalaciones".
"Los soldados de ocupación agredieron y golpearon a muchos enfermos, heridos y desplazados, así como a varios trabajadores sanitarios", ha reseñado, al tiempo que ha incidido en que también "forzó a varios a quitarse la ropa", sin que las autoridades de Israel se hayan pronunciado sobre estas denuncias.
El balance es el primero que publican las autoridades gazatíes en varios días, después de que el portavoz del Ministerio de Sanidad de la Franja, Ashraf al Qidra, confirmara el martes que no podían actualizarlo debido a la falta de conexión de Internet y la pérdida del contacto con los hospitales.