Su nombre es Iván Martín, tiene 22 años y es uno de los futbolistas más deseados por el Deportivo Alavés y Javi Calleja. Tanto, que el club babazorro ya ha hecho una oferta al Villarreal para incorporarlo en calidad de cedido hasta final de temporada y reforzar así un centro del campo que a día de hoy sigue en ciernes tras la marcha de Manu García, Rodrigo Battaglia y Jota Peleteiro.
No obstante, los albiazules tendrán que esperar. Tanto él como el central Jorge Cuenca, por el que el Glorioso también ha movido ficha, van a hacer la pretemporada con Unai Emery y, si finalmente salen del cuadro groguet en busca de minutos, será en el mes de agosto.
Respecto a Iván Martín, este arrancó su andadura en el mundo del fútbol en las categorías inferiores del Torre Pacheco (Murcia). En 2011, con 12 años, ingresó en la cantera del Villarreal y, desde entonces, fue subiendo escalones hasta llegar al filial amarillo en la temporada 2018-19. El curso pasado, tras dos campañas en Segunda B, se marchó cedido al Mirandés y se convirtió en una de las piedras angulares del equipo burgalés.
Ahora, después de 33 partidos, cuatro goles y seis asistencias en la División de Plata con los jabatos, este talentoso centrocampista, caracterizado sobre todo por su influencia en la zona ofensiva, va a pelear durante este verano por convencer al técnico de Hondarribia para quedarse en la primera plantilla de la escuadra castellonense. Un reto, sin duda, muy exigente debido a la encarnizada competencia con la que cuenta el Villarreal en su centro del campo.
Jorge Cuenca, por su parte, tiene 21 años y transcurrió su etapa de formación en la Escuela de Fútbol de la AFE, el Alcorcón y el Barcelona, que lo traspasó, con la pertinente cláusula de recompra, al submarino amarillo en el mercado veraniego del año pasado. Nada más llegar, la entidad de la Cerámica optó por enviárselo prestado al Almería, donde el defensor madrileño asumió un claro papel de líder en el centro de la zaga andaluza –35 partidos, tres goles y una asistencia–.
Rubén Peña Según ha adelantado el Periódico Mediterráneo, otro de los futbolistas de la escuadra groguet por los que se ha postulado el Alavés es Rubén Peña. El Villarreal necesita aligerar su presupuesto salarial para acometer cuatro o cinco refuerzos y uno de los jugadores que tiene muchas papeletas para dejar tierras valencianas es el de Ávila.
Peña, de 29 años, tiene una notable experiencia en la máxima categoría (Real Valladolid, Eibar y Villarreal), participó en 30 encuentros (19 en Liga) el curso pasado y cumple con el requisito de polivalencia de Sergio Fernández, que, durante la presentación de Toni Moya y Carlos Isaac, admitió estar buscando fichajes que puedan ocupar diferentes posiciones. En ese sentido, el abulense puede jugar de lateral, carrilero y extremo; y, aunque su banda predilecta es la derecha, también puede adaptarse ocasionalmente a la izquierda.
Sin embargo, el principal impedimento para efectuar esta operación vuelve a ser una vez más el factor económico. Un traspaso es inviable, pues el Villarreal pagó ocho millones de euros por él y quiere recuperar parte de lo invertido, pero una cesión con opción de compra podría salir adelante. Para ello, eso sí, el Alavés debería asumir la ficha completa.