Japón se convierte en un socio fuerte de Euskadi en productos de alta tecnología

Japón se ha convertido en un socio fuerte de Euskadi en productos de alta tecnología. Esto se produce, además, en un momento en el que se registra un retroceso general en las exportaciones por la caída de los productos energéticos, marcada por el frenazo en la demanda recibida por Petronor. Y es que las grandes economías de Europa, a su vez importantes mercados para Euskadi, compran menos por el enfriamiento que atraviesan sus economías. El de agosto es el quinto mes consecutivo en negativo de las exportaciones vascas.

Ante este escenario, destaca el crecimiento tanto de las ventas como de las compras de las empresas vascas a Japón. Las exportaciones a Japón comenzaron a incrementarse desde 2015, con un máximo en 2016 por las fuertes ventas de automóviles. Posteriormente, los incrementos han sido más moderados, salvo este 2023, cuando vuelven a crecer fuertemente. Así, entre enero y agosto de este año, Euskadi exportó al país nipón productos por valor de 143 millones de euros –43 millones de euros más que en todo 2022–. Según los datos, las exportaciones han crecido un 43% en los últimos cinco años –en 2018, el valor fue de 67 millones de euros–.

Sin embargo, el saldo comercial con Japón es históricamente es negativo para Euskadi. Y es que las importaciones son superiores a las exportaciones. Así, entre enero y agosto de este año, Euskadi importó productos japoneses por valor de 189,89 millones de euros –23 millones más que el año pasado–.

Hay dos partidas que suponen más del 70% de las exportaciones: vehículos automóviles y siderurgia. Por detrás estarían los productos químicos y la maquinaria industrial y los equipos de telecomunicaciones. Según la Spri, un total de 376 empresas vascas exportan regularmente a Japón. En el caso de las importaciones, hay tres partidas que suponen más del 50% de este apartado: fundición de hierro y acero, reactores nucleares y vehículos automóviles. Por detrás estaría la maquinaria industrial y los equipos de telecomunicaciones.

Economía japonesa

Japón es uno de los principales exportadores de vehículos, maquinaria, electrónica y robótica. Tradicionalmente, la nipona no ha sido una economía abierta, aunque parece que eso está cambiando actualmente. La suma de sus exportaciones e importaciones de bienes absorbieron un 31% del PIB en 2020, lo que todavía no es una tasa alta –en el caso del Estado español es del 67%–. El valor de sus exportaciones está en torno a 750.000 millones de euros. Sus principales socios comerciales son China y Estados Unidos.

Desde 2019, Japón tiene un acuerdo de asociación económica con la Unión Europea, que elimina prácticamente los aranceles a las importaciones de productos europeos y viceversa. Según la Spri, “Euskadi está exportando por debajo de su potencial, según estudios recientes, mientras que parece que, desde la firma del tratado con la UE, son las empresas japonesas las que más están aprovechando dicha disminución de barreras entre ambos mercados”. “Las oportunidades que presenta pueden materializarse tanto mediante exportaciones como mediante inversiones locales o acuerdos de colaboración”, destaca la Spri, que también advierte que “es un país de costes elevados”.

En su reciente visita a Japón, el lehendakari Iñigo Urkullu presentó a Euskadi ante instituciones y empresas japonesas como un “socio serio, fiable y competitivo”.

La Agencia Vasca de Internacionalización abrió una oficina en Tokio el año pasado y señaló cinco sectores estratégicos como clave para las empresas vascas: automoción, máquina herramienta, energías renovables, TICs y dispositivos médicos. En la lista de socios comerciales de Euskadi, Japón se sitúa hoy en día en el puesto 31 y cuenta con 14 implantaciones vascas, la mayoría del sector automoción y de fabricación avanzada.