El consejero vasco de Industria, Transición Energética y Sostenibilidad, Mikel Jauregi, ha afirmado que hay que descarbonizar la industria, pero sin arriesgarse a la desindustrialización, lo que supone "todo un reto", pero Euskadi avanza en el "buen camino".
"De hecho, en los últimos años, la industria vasca ha conseguido reducir su huella de carbono en más de un 5% cada año, mientras que la producción industrial aumentaba", ha subrayado, para aseverar que es posible perseguir ambos objetivos simultáneamente.
Jauregi ha participado este miércoles por la tarde en Bilbao en el congreso Basque Circular Summit, dentro de una mesa redonda con el excomisario europeo de Medioambiente, Janez Potocnik, donde han debatido sobre retos y oportunidades de Economía Circular en Europa. Junto a ellos también han estado Alejandro Dorado, comisariado para la economía circular del Gobierno español, e Irantzu Allende, viceconsejera de Transición Energética del Gobierno Vasco.
Descarbonización
En su intervención, el consejero de Industria ha resaltado que los objetivos de descarbonización del Gobierno vasco son "claros". "Hemos reducido las emisiones de nuestra industria en un 45% desde 1995 y queremos alcanzar las cero emisiones netas en 2050. La sostenibilidad hará que nuestra industria sea más competitiva", ha indicado.
En este proceso, según ha dicho, la economía circular desempeñará un papel "clave". "Hemos demostrado que es posible unir un compromiso con la protección del medio ambiente y, a la vez, impulsar una economía competitiva. El viaje que iniciamos juntos en 1995, empresas y Gobierno, ha sido clave para avanzar hacia un sector industrial más competitivo y sostenible, con una reducción de emisiones industriales del 45%", ha destacado.
Ante un Gobierno de Donald Trump "que se ha convertido en portavoz del negacionismo climático y se ha retirado del consenso de los Acuerdos de París", ha instado a reivindicar el liderazgo ambiental. "Nuestra apuesta debe ser por más industria y por más Europa. Y ahí Euskadi tiene una importante oportunidad, no solo para ser protagonista de la reindustrialización Europea, sino para defender el valor de la sostenibilidad con un Plan Industrial que abrace el Clean Industrial Deal europeo", ha señalado.
Economía circular
A su juicio, ahí la economía circular puede jugar un papel "crucial", ya que la sostenibilidad es un objetivo europeo que ayudará a diferenciar la industria vasca de los productos internacionales.
"Hasta ahora hemos demostrado cómo apostando por la economía circular podemos reducir los residuos que generamos, consolidando al mismo tiempo nuestra industria. Ese es el camino. Euskadi puede situarse en la vanguardia del avance de las tecnologías limpias y podemos ser un referente en la industria limpia en Europa", ha manifestado.
A lo largo de su intervención, el responsable vasco de Industria ha defendido que la sostenibilidad y la competitividad "no deben considerarse mutuamente excluyentes". "Perseguir un modelo de crecimiento sin consideraciones ambientales o sociales, no es sostenible y va en contra de los objetivos y los valores de la UE", ha constatado.
Por otro lado, ha recordado que desde el Gobierno Vasco se ha avanzado "mucho" en generar demanda de productos circulares. Como ejemplo, ha citado la Ley de Administración Ambiental, que en su Artículo 84 señala que "los pliegos para la ejecución de contratos de obras deben recoger el porcentaje mínimo de utilización del 40% de subproductos, materias primas secundarias, materiales reciclados o provenientes de procesos de preparación para la reutilización".
Prácticas sostenibles
Otro dato "relevante" que ha citado es que un 54% de las licitaciones de la Administración vasca recogen criterios ambientales en las categorías priorizadas en el Programa de compra pública verde 2030.
"Estamos convencidos de que las empresas e industrias vascas pueden liderar la transición hacia una economía circular mediante la adopción de tecnologías innovadoras y prácticas sostenibles. Tenemos ejemplos importantes como el de SteelPhalt, un proyecto industrial circular implantado recientemente en Euskadi, que reutilizará las escorias de la siderurgia para producir asfalto sostenible", ha relatado.
En esta línea, ha apuntado que la colaboración estrecha público-privada entre las empresas, la industria y el Gobierno Vasco, es "esencial" para alcanzar los objetivos de competitividad y sostenibilidad.
"Las empresas pueden aportar su experiencia y conocimientos técnicos para ayudar a diseñar políticas que sean tanto efectivas como prácticas. Además, pueden participar en iniciativas conjuntas, como proyectos piloto y programas de formación, que faciliten la implementación de la economía circular a nivel local y nacional", ha señalado.
Tras recordar que "hay una apuesta clara" por reindustrializar Europa, ha manifestado que la línea en Euskadi es contar con más industria, pero también "mejor industria". "Para ello, contaremos con elementos como la circularidad y la descarbonización, que van de la mano. Si hacemos un uso más eficiente de los recursos, mejoraremos la competitividad y la sostenibilidad de nuestras empresas", ha indicado.
Según ha sostenido, la circularidad es "también una oportunidad de proteger a nuestras empresas y de contribuir a su competitividad". "Se trata de hacer una transformación gradual que nos permita adaptar los modelos de negocio. Debemos ser conscientes de que las empresas van a tener que hacer una diversificación de negocios, pero el foco está en mantener nuestras industrias, que sean mejores, y desde luego que sean capaces de generar más puestos de trabajo", ha concluido.