“Como pelotari hay pocas cosas más grandes que meterse en una final del Manomanista”, dice Javier Zabala. Enfoca el de Aspe la semifinal de este sábado en el Labrit de Iruñea con la ilusión de haberse encontrado de lleno en una fiesta a la que, en principio, no parecía invitado. Debutante en Primera tras las buenas trazas demostrados en los teloneros programados por su empresa y las sustituciones durante el Parejas, el retrovisor del delantero riojano se retrotrae a dos instantes.
El primero, apenas una semana después de debutar, cuando fue de la partida en una previa de Primera, algo insólito. Cayó contra Peio Etxeberria. El segundo, en el Manomanista de Promoción de la pasada campaña, cuando tenía todo para clasificarse para las semifinales, yendo 21-8 ante un eliminado Iker Larrazabal, y terminó encajando un tropezón por la mínima doloroso pero aleccionador. Aquel 7 de mayo se destruyó un Zabala, pero se construyó otro más fuerte. “Me tomo las derrotas a bien”, dice.
Lesión de Jon Mariezkurrena
Baiko anunció este martes que Mariezkurrena II sufre una rotura muscular en el tercio superior del músculo recto anterior en el cuádriceps de la pierna derecha. Estará unas semanas de baja.
En el salpicadero de la gran novedad de la pelota a mano profesional actual, la posibilidad de la final más grande. El 2 de junio marcado en rojo en el calendario. Escenario: frontón Bizkaia. “Es la modalidad que más me ha gustado de siempre. Tengo una piedra difícil en el camino e intentaremos pasarla como sea. Ante un pelotari como Unai Laso, un gran campeón, son palabras mayores. Es un sueño desde que me vestí de blanco por primera vez”, explica el logroñés.
La mano de Zabala
Todas las miradas apuntan a la mano derecha de Zabala. Es positivo para la cita del Labrit. “Este fin de semana pude hacer pelota dos días y también el lunes. Me he puesto tacos para hacer la elección de material. Le doy a gusto, sin miedo. Estoy contento”, especifica el riojano.
Agrega que “en un partido de este calibre, me duela la mano o no, voy a hacer como si no pasara nada. Me pondré taco como si estuviera al cien por cien. Quiero gozar y para ello tengo que arriesgar. No sé si me fastidiaré más o no, pero la ocasión lo merece”. Le ha dado quebraderos de cabeza, pero augura jugar con plenas garantías.
La opinión de Unai Laso
Unai Laso, por otro lado, parte con el cartel de favorito. “Quizás por la veteranía en estos partidos. Él llega a su primera semifinal y está con toda la ilusión. He pasado por esos momentos: estás con toda la confianza del mundo. Va a ser un rival muy peligroso”. Asimismo, declara que “ha demostrado que juega una barbaridad. Si juega bien, te puede sacar a pelotazos. Intentaré aguantarle y hacer mi juego”.
El navarro, que disputa su cuarto partido del Manomanista en el Labrit, su hogar, analiza que llegar a la semifinal es “un premio”. “Al principio del campeonato el objetivo era llegar al nivel de antes. Me ha respondido bien la cadera. Estoy física y mentalmente bien”, especifica el errotarra.