Cada vez son más los profesionales que reclaman cambios en los protocolos que se aplican en los centros escolares y para los menores en general para hacer frente al coronavirus. La Asociación Catalana de Pediatría, este lunes la Asociación Española y desde la pasada semana un grupo de 16 pediatras vascos que ha pedido un cambio de paradigma en los planes de seguimiento y control del coronavirus en la población infantil. Piden eliminar las cuarentenas para los contactos así como los test masivos, la mascarilla en las aulas y los grupos burbujas.
Entre ellos está Jesús Sanchez Etxaniz, pediatra en el hospital de Cruces y responsable de la Unidad de Atención domiciliaria pediátrica que considera que en estos momentos no se puede hacer lo mismo que se hizo al inicio de la pandemia y ha subrayado que relajar las medidas no va a suponer un riesgo para los niños que tienen una afectación "leve" en el 99,5% de los casos en que contraen el coronavirus.
Llamada a la reflexión
"Hacemos una llamada a la reflexión sobre las medidas. Hace dos años había cosas que desconocíamos pero ahora sabemos mucho más", subraya y cree que lo primero es diferenciar entre las medidas que se adoptan para los adultos y las que se establecen para los niños y niñas. "No se trata de distinguir entre buenos y malos. Somos pediatras y yo no soy anti nada, busco velar por la salud de los niños", defiende Jesús.
Recuerda que al inicio de la pandemia se calificó a los niños como supercontagiadores y que el tiempo ha demostrado que esto no es así pero no se trata ahora de criticar, matiza, sino de "reflexionar para que lo que no estaba justificado se perpetúe". En este sentido afirma, nadie está hablando de que los niños vayan enfermos a clase ni mucho menos. "Es responsabilidad de todos pero también con el resto de virus", recuerda.
Cuarentenas
Preguntado específicamente por las cuarentenas, entiende que como en el resto de infecciones "la cuarentena debe hacerla el enfermo". "Esos aislamientos deben hacerse como en otros cuadros víricos, cuando hay clínica aparente", explica y cuestionado por los asintomáticos, asegura que sin síntomas tienen una capacidad de contagiar mínima e insiste en que además más allá de los cinco o siete días el procentaje de personas que transmite es "muy pequeño". En este sentido apunta a que se ha demostrado que los niños se contagian poco entre sí y que normalmente los casos de brotes que se han dado en centros escolares son en su mayoría por contagio de adultos a niños pero no entre ellos.
Secuelas
Este pediatra del Hospital de Cruces rechaza las medidas "por si acaso". "Hay que mirar si son dañinas o no porque hacer medidas ad eternum no es inocuo", advierte y añade, "no es bah, pues le dejo en casa. Es que estamos viendo y vamos a ver, no tengo ninguna duda, secuelas de esto que les estamos haciendo a los niños". Pone el acento en la necesidad de socializar para el desarrollo de los niños, para crecer y especialmente en no meter miedo a los niños. "Es vital. Crecer con miedo, con incertidumbre no es nada bueno, deja secuelas y lo estamos viendo".
Jesús Sánchez Etxaniz cree que las medidas deben diferenciarse de una vez focalizando siempre el seguimiento a los vulnerables y concluye con un mensaje de tranquilidad a los padres y madres: "relajar las medidas no va a suponer ningún riesgo para nuestros hijos".