El polémico Dominic Cummings, ex asesor del primer ministro británico, divulgó este miércoles la foto de una captura de pantalla de una conversación de WhatsApp mantenida con Boris Johnson, en la que éste insulta al titular de Sanidad, Matt Hancock, por su gestión en la pandemia.
El controvertido Cummings, que recientemente criticó con dureza al Gobierno, al que describió como caótico, y se ensañó con el responsable de Sanidad, a quien llamó "mentiroso", en un testimonio ante dos comisiones parlamentarias, publicó hoy en Twitter la imagen de un intercambio de mensajes en el pasado con el líder "tory".
En esa conversación mantenida mediante la aplicación móvil WhatsApp, Cummings dirige un comentario crítico sobre la gestión de Hancock en el asunto de los test para detectar la covid-19.
A este comentario, Johnson responde: "Totally fucking useless" (algo así como "totalmente un jodido inútil").
En su cuenta de Twitter, C ummings indica que el pantallazo en cuestión representa una "evidencia sobre el desastre de la covid" y añade que "como el propio primer ministro dijo, la gestión de Hancock sobre los test, adquisición, equipamiento de protección personal, hogares de ancianos, etcétera fue totalmente jodidamente inútil y su versión ante los diputados, ficción".
El mensaje está fechado el 27 de marzo de 2020 y en él Cummings dice a Johnson: "Estados Unidos ha pasado de 2.200 tests quincenales a 27.000 hace una semana y a 100.000 ayer. Esto es lo que nosotros dijimos que deberíamos hacer. En lugar de eso seguimos atascados en unos 5.000-7.000 y MH (por Matt Hancock) dijo hoy que es escéptico acerca de llegar a 10.000 para el lunes, lo cual dijo que 'definitivamente' ocurriría el martes".
Continúa señalando que "esto quiere decir que decenas de miles trabajadores del NHS (servicio público sanitario del Reino Unido) no estarán trabajando en las próximas tres semanas críticas. Aparte de lo que yo ya dije que el sistema de tests es integral al plan de escape".
Cummings, que dejó Downing Street en noviembre del pasado año, ha centrado gran parte de sus duros reproches contra el manejo del Gobierno, en especial contra Hancock, de quien opinó que debería haber sido "despedido en al menos en 20 ocasiones" y al que calificó de "mentiroso" tanto en público como en privado.