“He dormido bien, pero el viernes normalmente ya empiezo a hacerlo mal. Es algo que toca y que no controlas. Hay veces que he descansado mal y he tenido buenas sensaciones, me pasó contra Aitor Elordi en la semifinal, y al revés”, cuenta Jokin Altuna. No se acostumbra a las finales. Es imposible. La experiencia está ahí. Es fundamental, mas no tranquiliza el nervio. Es consciente de que durante el día, aferrado a la rutina, no tiene “tiempo para pensar”. Es por las noches cuando crecen los pensamientos, la euforia y las dudas. Es incontrolable. Deshoja la margarita de la final del Cuatro y Medio del domingo en el Bizkaia de Bilbao ante Joseba Ezkurdia.
“El saque se ha convertido en lo más importante en el Cuatro y Medio en los últimos años. Es por el material. A veces la pelota no te da siquiera la opción de meter la mano. En la semifinal del Labrit, Peio Etxeberria movió bien a Joseba, pero él le hizo una brecha con el saque. Solo el primer pelotazo asusta”, declara el amezketarra. Precisamente, el disparo inicial ha sido lo que mejor ha funcionado a su rival. “Debo buscar los ángulos y tocar bien la pelota. La velocidad del pelotazo de Joseba me puede sacar atrás. El saque será fundamental”, analiza Jokin, quien abunda en que “si Ezkurdia saca bien no me va a perdonar en el siguiente pelotazo. Me tocará defender contra un pelotari muy agresivo”. El mando en la cancha será “vital”. “Joseba es supercompleto, pero me preocupa lo mío, mi trabajo. Para llegar aquí hay mucho trabajo por detrás”, prosigue.
Sobre el papel de favoritismo que le deja Ezkurdia, el guipuzcoano sostiene que “sí que veo que salgo favorito en muchos partidos, pero no soy el gran favorito. Él es cinco años mayor y está en un gran momento. Eso no podemos olvidarlo”. Por tanto, Altuna III defiende que la final es “una oportunidad única”. “Lo llevo con cierta tranquilidad. Cuando llegas con tantos títulos y finales, estás más tranquilo”, destaca. “Ningún partido sirve de referencia”, determina Jokin. Analiza que está preparando la cita “como cualquier partido”.
Se trata de su séptima final del Cuatro y Medio consecutiva. En su primer año, en 2015, quedó apeado en la liguilla de cuartos de final. En total: tres txapelas (2017, 2020 y 2021). “Cuando entreno nunca pienso en si va a ser la primera, la segunda o la séptima final. Hay pelotaris con diferentes estados de forma y el que llega está en su mejor momento. Afronto cada final como un reto”, disecciona el amezketarra..
EL FRONTÓN CAMBIA
Las dos finales entre Ezkurdia y Altuna III se disputaron en el frontón Navarra Arena y las ganó el navarro. Es una cancha exigente y rápida. Por las características de cada uno, el Bizkaia podría favorecer más al campeón. “Los grandes pelotaris juegan bien en cualquier frontón y Joseba es uno de ellos. Es supercompleto”, desgrana el guipuzcoano, quien reflexiona que “el pelotari quiere jugar en un sitio que puede preparar el partido como quiere. Sabemos que esto es un negocio, pero hay que cuidar los detalles. En Bilbao podemos entrenar cuando queramos y eso es importante”.
EL MATERIAL
Respecto al material, Altuna III concreta que “se trata de un buen material”. “Son pelotas como las del resto del campeonato. Sientes la capacidad de hacer una avería cuando atacas. Son lotes parecidos: en frontis no salen mucho, pero en el suelo corren. Eso depende de las características del cuero”, finaliza.