Lo de Jon Zuazola es el rock & roll . Presenta este viernes en el Kafe Antzokia de Bilbao su Versión Original con la banda que lidera, ZUA. Aunque dos años después de lo que estaba previsto, debido a la pandemia. Este primer álbum del grupo contiene 10 temas rockeros grabados en castellano. Cuentan con unos colaboradores excepcionales a los coros del tema Divididos puesto que la banda colaboró con 24 chavales de la Fundación Síndrome de Down del País Vasco en la grabación, tanto de la canción como del videoclip.
La presentación de este disco estaba prevista para el 14 de marzo de 2020, justo un día después de la declaración del estado de alarma. ¿Cómo llevasteis el chasco?
—Estábamos con todos los preparativos y se paró el mundo. Era una cancelación y no se pudo hacer nada más, con pena nos fuimos a casa y pensando ‘bueno, ya lo haremos’. Lo que estaba claro es que ese disco lo íbamos a guardar. No lo íbamos a sacar hasta que no pudiésemos ver a la gente como la vamos a ver hoy, a la cara, bailando y sin mascarillas.
¿El tiempo que ha pasado entre aquella presentación que no pudo ser y el concierto de hoy ha influido en la banda?
—Hay gente que no ha podido seguir en el proyecto, pero a nivel de banda hay otros igual de implicados. Ha salido muy reforzada de esto. En ZUA lo que hacemos es intentar verlo siempre todo desde el prisma positivo. Nosotros nos sentimos 100% rockeros y esa energía es la que necesitamos tener para luego trasladar en directo.
¿Cómo ha sido vivir y disfrutar de la música este tiempo?
—Era imposible. Nos quedó componer y estar cada uno trabajando en casa. Nos ofrecieron tocar para público sentado pero nosotros no queríamos eso.
Tendréis sobre el escenario unos colaboradores de lujo. Los coros y el videoclip del tema ‘Dividido’ cuenta con la participación de 24 personas de la Fundación Síndrome de Down. ¿Cómo fue el proceso?
—El proyecto fue una idea maravillosa. Llevaba unos años colaborando pero poder trabajar con ellos iba a ser bonito sí o sí. Estaban súper implicados. No sabemos explicarlo porque para nosotros es muy emocionante. Vivir esos nervios de ellos grabando, que luego vayan al videoclip… Recibí tanto tanto amor que va a ser imposible devolverlo.
¿Qué has aprendido?
—De todo. Lecciones humanas de todo tipo. Hay una generosidad tan grande que ojalá nosotros a diario pudiéramos desarrollar esa capacidad, esa generosidad, ese quererse y apoyarse tanto entre ellos. Nosotros tenemos mucho que aprender. Son el mejor coro del mundo, lo diré y lo repetiré, porque lo dan absolutamente todo.
Anteriormente, habías pasado por bandas de versiones de rock&roll como The Remakes (U2, Dire Straits) o The Grovies (versiones de los años 70 para grandes conciertos). ¿Podrías explicarnos qué es ZUA?
—Cuando empezamos en la música, vimos que para seguir adelante lo que más fácil resultaba eran los grupos de cover: daba la posibilidad de subirnos al escenario, tocar canciones que nos gustaban y poder ser profesionales de la música. Tocábamos en las fiestas del Guggenheim, llegamos a abrir el Starlight Festival y ganar una Antena de Oro. ZUA es lo que nos sale de dentro. En el tema ‘Mi versión original’ se habla de una forma de ir “contra viento y marea” y pelear por seguir en la música.
¿De allí el título del disco (’Mi versión original’)?
—Después de llegar de una gira, me senté en casa y mi aita me dijo “Deberías hacer una versión propia tuya, algo tuyo original”. Aquí está.
¿Qué se va a encontrar el espectador esta noche en el Antzoki?
—Un nivel de energía altísimo y una banda que se va a dejar el alma. Van a bailar porque va a ser transmisión directa. Llevamos dos años esperando para subir a ese escenario así que lo que esperamos es que todo el mundo vibre, será puro fuego.