José Luis de Castro: "Rusia ha jugado muy fuerte y desandar el camino no es fácil"

Tras una semana de reuniones infructuosas, hoy se celebra en Ginebra un encuentro al más alto nivel para tratar de rebajar la tensión en torno a la situación en Ucrania. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, acuden a la reunión con voluntad de diálogo pero con pocas esperanzas de resolver este conflicto que preocupa en Occidente y evoca una política de bloques que se creía pasada.

El objetivo compartido es reducir la tensión tras los movimientos de tropas y las acusaciones a Moscú de planear una invasión de Ucrania a mayor escala de la que viene realizando de facto desde 2014 en Crimea y el Donbás. El profesor de Relaciones Internacionales de la UPV-EHU, José Luis de Castro, ha afirmado en Onda Vasca que "siempre que hay negociaciones y práctica diplomática es algo positivo". También considera que cualquier análisis sobre este asunto tiene que ser "muy cauto" y, aunque no cree que llegue a haber un conflicto armado abierto, reconoce al mismo tiempo que va a ser difícil que Rusia dé marcha atrás en sus pretensiones ya que "ha jugado muy fuerte" y afirma este conflicto no se resolverá "ni en un día ni en dos".

Y es que Rusia mantiene sus líneas rojas como la de que la OTAN deje de extenderse hacia sus fronteras. Según De Castro, "el sentimiento ruso es de que Occidente ha avanzado demasiado hacia el este" aprovechando la mala situación económica de Rusia tras la desintegración de la URSS. En cuanto a la postura de Estados Unidos, el jefe de su diplomacia, Antony Blinken también ha reconocido en las últimas horas que no espera que las diferencias se resuelvan en el encuentro de hoy y sigue advirtiendo de una respuesta "rápida y severa" si se produce la invasión del territorio ucraniano.