Hoy es todo felicidad, en el que evidentemente hay cansancio, cansancio acumulado de la jornada de ayer pero un cansancio que se lleva muy bien después de la victoria ante el FC Barcelona por 4 goles a 2.
Prórroga decisiva para el Athletic
En la prórroga llegó lo mejor del partido porque ahí vinieron los goles y ahí vino la clasificación para las semifinales del equipo rojilanco. Un partido que se hizo largo. Preveíamos que podía suceder esto, pero claro, cuando arranca el choque y el Athletic mete en el primer minuto el gol, entonces ya no es que se ponga el campo cuesta abajo, pero sí que quitas mucha presión. Sobre todo, entiendes que va a ser muy largo todo pero que el Athletic ya ha hecho nada más empezar un avance importante en su objetivo. Luego llegó el empate y después llegó el segundo que, la verdad, metió un golazo Lamine Yamal tremendo.
Tras el descanso vino lo mejor, vino la apoteosis, vino el revolcón del Athletic, vino la superioridad rojiblanca, vino un león que se comió al Barcelona y no dejó ni los huesos. Se lo merendó.
Un Athletic descomunal
Un Athletic fuera de cualquier parámetro físico, con una intensidad tremenda, con un brillo en los ojos de los futbolistas de las veces en las que yo, por lo menos, más les he visto vibrar, brillar y disfrutar. Un equipo que tenía delante a muy buenos jugadores, pero que sabía que con el apoyo de una grada, que ayer, por cierto, fue una de esas noches en las que, uno no se siente orgulloso, se siente lo siguiente a orgulloso de ser del Athletic.
La afición
Ayer San Mamés apoyó cuando tenía que apoyar, apoyó desde el inicio, apoyó cuando el equipo lo necesitaba. Cuando esos momentos en los que el Barça se pone por delante, ahí estaba la afición del Athletic para llevar en volandas, para levantarles del suelo. Como ese boxeador que cae en la lona, ahí estuvo la afición para levantarlo y, sobre todo, para decirles: "tranquilos, que aquí estamos nosotros para aguantaros, para sosteneros y para llevaros para arriba".
Tras el descanso vino lo mejor, el corazón que puso este equipo, las piernas que puso este equipo, la verticalidad, el tener la idea clara de recuperar y tirar para arriba es algo que uno no puede sentirse más orgullo. Esa es la gran maravilla lo que ha conseguido Valverde, lo que han conseguido estos futbolistas.
Los jugadores lo dieron todo
Prados, Don Beñat Prados, que hay que, evidentemente, ya darle el trato de 'Don', sostuvo al equipo junto con Sancet, obvio que con la colaboración de compañeros, de acuerdo, pero estos dos fueron hasta el descanso los mejores.
Sin embargo, tras el descanso, hay que destacar la aparición de Unai Gómez y, por supuesto, los Williams, propongo directamente vicepresidencia de honor a la madre de los Williams. Cargo para toda la vida, vicepresidenta de honor, sin ningún tipo de trabajo, que le dejen tranquila, pero que lo disfrute, porque haber traído a sus hijos al Athletic junto con Félix Tainta esto es lo más grande que ha pasado en el equipo rojiblanco en muchísimo tiempo. Estos futbolistas junto con Sancet ahora mismo son el tridente más importante de la liga.