Pocos apellidos hay tan vinculados a la cocina como Arguiñano. A Karlos a estas alturas ya no hay que presentarlo, es de los personajes más conocidos y queridos de la televisión, y la prueba es los años que lleva haciendo disfrutar con sus recetas en la pequeña pantalla. Pero en la familia hay más Arguiñano que comparten su pasión.
Eva, hermana de Karlos, también se hizo hace mucho tiempo con un hueco en las casas al colaborar en el programa de su hermano apostando por los postres, algo de lo que ella es especialista y que ha heredado su sobrino (e hijo de Karlos) Joseba.
Es el mediano de los siete hijos que Karlos y su mujer, Luisi Ameztoy, han tenido en común, y el más pequeño de los varones. A sus 37 años. Joseba, zarauztarra de pura cepa, está siguiendo los pasos de su padre y ya se deja ver tanto en ETB 2, con Historias a bocados como en ETB 1, con Joseba Arguiñano Sukalerrian. Curiosamente con este programa compite en horario (y temática) con el Cocina abierta de su padre, espacio en el que también ha colaborado.
Está claro que ha heredado el talento familiar para la cocina. Y lo ha visto muy de cerca, porque incluso en su época de estudiante, al salir del colegio, ayudaba en el restaurante para sacarse unos dinerillos. La cosa le gustó y decidió tirar por ahi, con notable éxito, que se plasma en el Premio Talento Gastro al mejor repostero que recibió en 2018.
Zarautz, el epicentro
Porque Joseba también ha tirado por el lado dulce de la gastronomía y gracias a él se gana la vida en su localidad natal, con un obrador de pan y una pastelería, además de haber participado en campañas de publicidad junto a su padre, con el que guarda un parecido más que evidente, en el físico y en el humor, aunque Joseba lo dosifica más, al menos en pantalla.
Pero más allá de la cocina y la televisión, ¿cómo es la vida de Joseba Arguiñano? El guipuzcoano vive en Zarautz con su pareja, Natali Fuentes, y sus hijos, Manex y Kaia, todavía muy jóvenes para pensar en fogones. Y, como buen zarauztarra, tiene el mar entre ceja y ceja, de ahí que sus aficiones sean el surf, la vela y la pesca, además de la pelota, la montaña, los animales y las motos, una de sus pasiones desde crío.