vitoria – Era algo previsible que Joselu Mato tampoco fuese de la partida ni compareciese ayer en Anoeta en la segunda parte. El problema es que, a diferencia de los dos primeros amistosos ante el Logroñés y el Amorebieta, el delantero gallego ni siquiera formó parte de la expedición albiazul hacia Anoeta para medirse a la Real. Y todo ello tras una semana donde su agente, en un intento de tensar la cuerda hasta límites insospechados, ha echado más leña al fuego de su cada vez más insostenible situación en Vitoria con unas incendiarias declaraciones.
Las supuestas molestias en el pubis que esgrimió Javi Calleja para justificar su baja parecen ser ya un argumento muy poco creíble mientras las negociaciones entre el Alavés y el Sevilla para formalizar el traspaso no avanzan al ritmo que el futbolista ni su entorno desean. El principal perjudicado de todo ello, mientras tanto, es el propio equipo vitoriano, que no puede permanecer ajeno a la polémica ni al ruido alrededor de uno de sus futbolistas más importantes de la plantilla.
Otra ausencia significativa del Alavés en la jornada de ayer fue Luis Rioja, que en principio no sufre ninguna dolencia pero todo apunta a que podría ser el positivo por covid-19 notificado por el Alavés en su plantilla.
Por lo demás, el amistoso ante la Real dejó como hecho más noticioso el debut del recién llegado Mamadou Loum. El fornido senegalés marcó territorio desde el principio y se ganó una amarilla por una dura entrada a un rival. Precisamente el medio llegado del Oporto conformó durante algunos minutos el doble pivote junto a Toni Moya, que también se estrenó con la elástica albiazul tras haber sido víctima del coronavirus al poco de llegar a Vitoria.
Calleja repartió el protagonismo entre todos los integrantes de su plantel y otro que comenzó a ganar algo de rodaje de cara al comienzo liguero fue Lejeune. El central galo ya anunció el viernes que estaba para disputar algunos minutos e hizo acto de presencia en la segunda mitad.