Juanjo no dudó de que algo tenía que hacer cuando estalló la invasión en Ucrania y comenzó el éxofo de refugiados de ucranianos que huyen de los ataques rusos. Cuando escuchó al taxista de Llodio con una iniciativa similar no perdió la oportunidad de sumarse a la iniciativa puesta en marcha por una ONG y salir con otros taxistas que han partido desde Valencia.
De esta forma, Juanjo partió el pasado viernes con su TESLA, su coche eléctrico hacia Polonia. En su caso no ha ido a la fronteria sino a la capital, a Varsovia donde le esperaban una abuela, su hija, su nieto y una amiga que lograron huir de su pueblo en Ucrania pero se quedaron "tirados" allí. No es el único otros cuatro taxis traen al resto de refugiados contactados por la ONG. En total 40 personas, muchos de ellos niños.
"No estaban esperando en una iglesia. Son más fuertes. Si nos pasa eso a nosotros estaríamos hundidos. No muestran tanto las emociones como los latinos. Te cuentan que han dejado a sus maridos y hombres en la guerra y ellas se van a 3 mil km. Yo no me hago a la idea. Me parece una película de ciencia ficción", afirma Juanjo.
Está claro que lo volvería a hacer. "Cada minuto que pasa estoy más orgulloso de haber venido", reconoce y agradece todas las muestras de apoyo y solidaridad recibidas. "Me han hecho bizum, del trabajo de la mujer, estibadores del puerto, una clienta del taxi que se ha gastado 250 euros en la farmacia. Increíble", remarca y prosigue. "He pasado por Alemania donde unas amigas que me han dado un montón de cosas. Una pasada. He venido con los gastos para cubrirlos yo y estoy casi cubierto con los gastos", señala. Incluso ha estado durmiendo en la casa de unos polacos amigos del youtuber Lars que está colaborando con esta iniciativa
Las 40 personas que estos taxistas han recogido van a Valencia. La familia que acompaña a Juanjo también, él les llevará a la frontera de la Junquera y allí un compañero les recoge destino Valencia.