Un flashback. Bilbao. 26 de marzo de 2023. 80 minutos de juego y 719 pelotazos a buena. Tolosa domina a un incómodo Zabaleta y el marcador refiere un 19-15 para las a priori víctimas Altuna III y Xabi sobre los rutilantes Elordi y José Javier. En el horizonte: la final del Campeonato de Parejas. Un grito. A Tolosa se le rompe el gemelo interno de la pierna derecha cuando apenas restaban unos centímetros para abrazar el objetivo. Se clasificaron los contrarios y acabaron ganando la txapela.
“Zabaleta está marcando muchas diferencias, pero este otro tipo de zaguero también está ahí”, define Jokin, quien reflexiona que “fíjese, el año pasado con Tolosa no entramos en la final cuando íbamos 19-15 ganando. Aquí hay que jugar mucho”. El Astelena de Eibar, a reventar, vive este domingo una tesitura similar: el amezketarra y Julen Martija se cruzan con Iñaki Artola y Ander Imaz. Cara o cruz. La meta: la cita por la txapela del Navarra Arena del 31 de marzo en la que ya se mecen Peio Etxeberria y Zabaleta, siempre él.
Se refiere el delantero guipuzcoano, sobre todo, a los dos guardaespaldas en liza, una vez eliminado del tapete Mariezkurrena II, otro poderosísimo manista. “Otra vez Ander Imaz y Julen Martija están en las semifinales del Parejas. Julen ha ganado dos txapelas (2020 con Ezkurdia y 2022 con Altuna III) y puede llegar a otra final. Ander puede jugar por su tercera txapela consecutiva (ambas con Laso)”, recuerda Jokin. Lo clava: ambos aspiran a su tercera final en la élite sin el brillo rutilante de los grandes pegadores. Tienen otras cualidades: dirección, capacidad de sacrificio y adaptación, derecha potente, encuentro con la pelota, competitividad, físico privilegiado, carácter...
“En las presentaciones siempre andamos diciendo que los pegadores son los que mandan. Eso es cierto por un lado, pero en las últimas ediciones del Parejas no se está viendo en las finales”, disecciona asimismo el guipuzcoano. “Quizás los que estamos vivos no somos los más pegadores, pero hay que tener muchas virtudes. Sabemos sufrir. Es una grandísima oportunidad para las dos parejas”, zanja Altuna III.