Julieta Mungo llegaba esta temporada al Osés Construcción Ardoi para reforzar el juego interior, después de conseguir el ascenso el año pasado con el Baxi Ferrol. La ala-pivot argentina promedia 10,6 puntos y 5,2 rebotes, y se está reivindicando como una de las mejores jugadoras de la LF Challenge, mientras su equipo, actual líder de la clasificación, es uno de los firmes candidatos a conseguir el ascenso.
Ha llegado está temporada al equipo, ¿cómo es su día a día en Navarra?
Pamplona es una ciudad tranquila, no la conocía pero me gusta, me gusta pasear, leer, sentarme a tomar un café, estoy muy bien en Navarra.
¿Cómo es el ambiente dentro del club y del vestuario con sus compañeras?
Hicimos un grupo increíble que creo que es parte de las victorias que llevamos. Contribuye a las victorias que llevamos el buen grupo que tenemos. La química que tenemos es la clave de que vayamos líderes ahora mismo, creo fielmente que si no hay buen rollo, si no hay buen vestuario es muy difícil que las cosas salgan bien dentro de la pista. Cuando las cosas van mal, saber que te puedes apoyar en tus compañeras es primordial.
Actualmente el Osés Construcción Ardoi es líder de la LF Challenge, ¿conseguirá ascender?
Lo veo muy difícil, yo creo que queda todavía mucha temporada por delante, es una liga súper competitiva en la que cualquier equipo es capaz de ganar a cualquiera, pero si es verdad que ahora estamos primeras por una leve ventaja y vamos a intentar mantenerla. Nosotras estamos enfocadas en el día a día, nuestro principal objetivo no era estar primeras, no era ascender directas, sino estar en los primeros puestos de la tabla, al final se fue dando y estamos tranquilas, sin ninguna presión y pensando en cada día.
A nivel individual, ¿cuáles son sus objetivos para lo queda de temporada?
Estoy muy cómoda dentro del equipo, siento muchísima confianza por parte de mis compañeras y del entrenador. A nivel individual mis objetivos son siempre poder ayudar al equipo en todo lo que pueda y en todo lo que me pida el entrenador.
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¿Cómo gestiona el estrés de la competición?
Tengo la suerte de no ponerme muy nerviosa, antes lo sufría más, pero con el tiempo fue cambiando. Todos queremos ganar, pero voy al partido súper tranquila y a dar el máximo, como es una liga tan competitiva no tenemos la presión de ganar siempre.
¿Cómo fueron sus comienzos en el baloncesto en Argentina?
Empecé a los cuatro años a jugar al baloncesto porque mi madre trabajaba en un club, y yo estaba todo el día allí, salía del colegio y me iba al club. Practiqué muchos deportes, pero nunca dejaba el baloncesto, siempre iba de la mano con los demás deportes.
Juantxo Ferreira, su actual entrenador, también fue el primero que apostó por usted en sus inicios en Argentina en el Temperley, ¿cómo llegó al equipo?
Empecé en el club Moreno de Quilmes, y a los 13 años me contactó un vecino que conocía a Juantxo Ferreira y me dijo que iba a entrenar al Temperley, un equipo que estaba en una liga mejor, y quería llevarme con él. Estuve dos años en el equipo, y después pasamos a Berasategui, en el que él también era el entrenador, y allí estuve seis años más. Juantxo Ferreira me ayudó mucho en mi formación y me hizo creer que podía dedicarme al baloncesto.
¿Qué diferencias encuentra ahora en el Osés Construcción con su primera etapa en el Temperley con Juantxo Ferreira?
Hay mucho cambio sobre todo por mi parte, en el Temperley yo era muy joven ahora veo las cosas diferente. A nivel deportivo, él siempre se mantuvo en su forma de jugar y en su filosofía, pero yo he madurado mucho desde entonces.
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¿Cómo se define como jugadora?
Me considero un poco polivalente. Me gusta mucho defender, ser intensa en defensa. Creo que puedo hacer un poco de todo, soy como el comodín del equipo.
¿Cuál ha sido hasta ahora el mejor momento de su carrera deportiva?
Cuando debuté con la selección absoluta de Argentina, fue un momento emocionante. También fue especial un Mundial 3x3 sub 23 en el que ganamos a Francia, que en ese momento eran las actuales campeonas, y fue un torneo increíble.
¿Qué consejo le daría a las jugadoras que están comenzando su carrera?
Les diría que no se olviden de disfrutar. Es verdad que el baloncesto, como cualquier deporte requiere muchísimo esfuerzo, pero al final disfrutar es lo más importante.
Si no se hubiera dedicado al baloncesto, ¿que le hubiera gustado ser?
Fuera del deporte, me hubiera gustado ser arquitecta. Me gusta mucho dibujar, tengo una cuenta de Instagram con mis dibujos (@julieta.ills), me gusta todo lo que es artístico.