La Final Four de la Euroliga 2023 se celebrará finalmente en Kaunas, según ha informado esta mañana el medio griego gazzetta.gr. La ciudad lituana, hogar del Zalgiris, ha estado desde el principio en la puja por poder albergar la fase final de la actual edición de la máxima competición de baloncesto europea, algo para lo que actualmente es favorita tras descastarse la opción de que se celebrara en Dubái, alternativa que salió a la palestra a finales de octubre. Aunque todavía no existe confirmación oficial, se espera que la competición lo anuncie a lo largo de este mes de noviembre.
La opción de llevar la Final Four a los Emiratos Árabes surgió a partir de la negativa del gobierno lituano a financiar con un millón de euros la celebración de los partidos decisivos del torneo en Kaunas, aunque finalmente la Euroliga se ha decantado por esta opción pese a no contar con dicha inyección económica. De hecho, la intención de la liga continental es facilitar primero la incorporación de un equipo de los Emiratos Árabes a la competición y apostar más adelante por la celebración de la Final Four en Dubái.
Será la primera vez que la Final Four del torneo continental se celebre en Kaunas, que, no obstante, ya tiene experiencia en la organización de este tipo de eventos al haber albergado la fase final del Eurobasket en 2011. Uno de los inconvenientes de celebrarla en Kaunas es la escasez de hoteles de la ciudad, que cuenta con alrededor de 300.000 habitantes, aunque se espera que la capital Vilna, situada a solo una hora en coche, pueda ayudar a satisfacer la demanda de alojamiento.
Un pabellón de primer nivel
Por lo demás, el Zalgirio Arena se trata de un pabellón idóneo para acoger la fase final de la Euroliga. La cancha del Zalgiris, inaugurada en 2011, es una de las más modernas de Europa y una de las que mejor ambiente presenta cada jornada. Pese a su amplia capacidad para 15.442 espectadores, ya se ha llenado en dos ocasiones en la actual edición del torneo y fue entre los años 2017 y 2020 el pabellón con mayor asistencia media de la competición.
La pasión con la que se vive el baloncesto en Lituania y en especial en la segunda ciudad más grande del país hará a buen seguro que la Final Four sea una auténtica fiesta y reine el buen ambiente tanto dentro como fuera del pabellón.