Kike Burgos: "No es nada fácil debutar tan joven"

Cede el testigo 31 años después a Julen Agirrezabala como portero más precoz en el Athletic

eL empate sin goles registrado el lunes en el Martínez Valero dejó un debut para la historia en la portería del Athletic, donde Julen Agirrezabala (Donostia, 26-XII-2000) se estrenó bajo los palos convirtiéndose en el guardameta más joven en disputar su primer partido oficial como león en las tres últimas décadas. Hay que retroceder hasta el 8 de noviembre de 1990 para recordar un estreno más precoz. Lo protagonizó, en un partido de Copa ante el Atlético Marbella a domicilio, el vizcaino Kike Burgos (Barakaldo, 20-I-1971), quien se ató los guantes por primera vez con el primer equipo rojiblanco con solo diecinueve años y con idéntico resultado al cosechado por Agirrezabala en Elche.

"Ha llovido bastante desde entonces y es difícil que ocurra algo así. Se tiene que dar alguna situación un tanto especial como la actual con Unai Simón de vacaciones, porque si no es complicado debutar tan joven en una portería como la del Athletic", explica a DEIA Burgos, quien recuerda que en su caso "estaba haciendo las cosas muy bien en el Bilbao Athletic, tuve aquella oportunidad en Copa y fue un momento muy especial para mí". "Lo normal es estar algo nervioso, porque no es nada fácil debutar tan joven, pero hay chavales que consiguen estar tranquilos y Julen hizo un buen partido con dos buenas paradas", señala el exguardameta barakaldarra, quien admite que "no tenía referencias sobre el chaval, pero apunta maneras y ahora mismo no tiene nada que perder".

"Tendrá seguramente más oportunidades y tiene que ir paso a paso para seguir creciendo", destaca asimismo Burgos, quien desde su experiencia aconseja a Agirrezabala "que siga trabajando igual de bien que hasta ahora". El futuro, sin ir más lejos, resulta impredecible y "siempre necesitas también ese puntito de suerte", subraya el actual director deportivo de un club almeriense de cantera como La Mojonera, quien guarda buenos recuerdos de sus cinco temporadas como león (1990-1995), si bien confiesa también que "lo pasé mal". Su notable proyección tras su temprano debut con el Athletic se vio interrumpida, no en vano, demasiado pronto debido a una importante lesión en un dedo y una mala dinámica del equipo que jugó en su contra.

Después de disputar el citado partido de Copa y otro de liga en su primer curso con el primer equipo bilbaino bajo las órdenes de Javier Clemente, en la siguiente campaña (1991-92) consiguió asomar en veintidós encuentros ligueros, pero "fui alternando la portería con Patxi Iru, no estábamos en una situación cómoda al faltarle regularidad al equipo y todo eso, siendo tan joven, no te permite jugar con la tranquilidad necesaria". "San Mamés, además, impone mucho", resalta Burgos, quien se perdió los Juegos Olímpicos de 1992 por su lesión en el dedo. "Tuve que operarme, estuve tres meses prácticamente parado y Jupp Heynckes apostó para la nueva temporada por Juanjo Valencia, que hizo una gran pretemporada y tuvo un gran año. Probablemente, el mejor de su carrera", recuerda Burgos, quien apunta que "a partir de ahí pasé a jugar solo algún partido de Copa y uno de liga en Valladolid antes de marchar en 1995 al Mallorca, de ahí fui al Alavés y después al Poli Ejido hasta acabar mi carrera".

"Fue complicado, porque pasar de jugar con la sub'21 a ir al banquillo en el Athletic fue un bofetón importante para mí, pero no tengo ninguna queja de los entrenadores que tuve", confiesa asimismo el de Barakaldo, quien recuerda así su experiencia animando a Agirrezabala a "pelear mucho".

"Tendrá que hacerlo, puesto que a día de hoy nadie duda de que el portero titular es Unai Simón por todo lo que ha demostrado, pero Julen ha jugado ya un partido, ha debutado y tiene que seguir trabajando esperando de nuevo su oportunidad, la cual no es fácil tener siendo tan joven en Primera División y menos en la portería", advierte el vizcaino desde el conocimiento que le otorga también su pasado como entrenador de porteros en las filas del Betis y Poli Ejido, así como segundo entrenador del Villarreal. "Tienes que ser un fenómeno para conseguir asentarte en una portería como la del Athletic y estar dotado de una gran tranquilidad como la que sí demostró Julen el lunes", finaliza el meta exrojiblanco.