Hay reyes que ejercen su reinado de forma impecable. Ejemplo de ello es Alan Duffy, más conocido como King África, quien anoche ejerció como el Rey del Carnaval, en el inicio de los carnavales de Sestao. Miles de personas se congregaron en la plaza San Pedro de la localidad de Ezkerraldea para gozar y saltar con éxitos como El Camaleón, Salta o La Bomba, un tema que nació como un relleno y que ha acabado siendo su gran éxito. “Me siento un privilegiado por conectar tanto y tan rápido con la gente a través de mi música”, señaló King África, quien cuenta con una agenda apretadísima gracias a sus actuaciones en fiestas populares y, también en bodas exclusivas.
El fin de semana pasado estuvo en el Carnaval de Ourense y ahora, Sestao y, nada más y nada menos que actúa hoy en el Carnaval de Santa Cruz de Tenerife. Tiene la agenda apretada.
Sí, afortunadamente después de la pandemia, como no se pudieron celebrar fiestas durante casi tres años, todo el mundo ha salido ahora como loco a celebrarlo. Nosotros entramos en un circuito de bodas, toqué un día para la influencer María Pombo en unos eventos que hace y una hermana suya nos contrató para su boda y de ahí nos han contratado para varias bodas más. Ahora, además de estar en el circuito de conciertos, estamos en el de bodas más exclusivas. Estamos con una gira muy potente y esperamos seguir por mucho tiempo.
Tras las limitaciones por la pandemia, me imagino que ahora será un placer mayor si cabe subirse a un escenario y hacer gozar al público.
Siempre lo ha sido. El día que me baje de un escenario será o porque me aburro o porque no transmito alegría. Ahora sí es cierto que lo disfruto mucho más porque la gente lo necesitaba y eso te llena más aún.
En Sestao están en carnavales y el Carnaval ha sido un tema clave en tus letras. ¿Qué tiene el Carnaval que le inspira?
Nunca lo había pensado... Ocurre que siempre grabábamos a principios de año y cuándo grabas a principios de año enseguida llega el Carnaval. Pensaban si publicar los temas en abril o en Carnaval y dependiendo de cómo sonará la publicaban en una fecha u otra. Mi primer gran éxito en el Estado fue en 1998 en carnavales de Santa Cruz de Tenerife con El Camaleón y, curiosamente, no es una canción carnavalera aunque así se tomó. El Humahuaqueño sí es una canción carnavalera. Pero sí, muchas de mis canciones salían en Carnaval y luego se quedaban como canción del verano.
¿Cuál es el secreto para que su música conecte tanto y tan rápido con la gente?
Eso me lo pregunto siempre con mi mánager. Es normal que una persona de 40 o 50 años cante La Bomba, pero que la cante un niño de 15 años cuando ahora solo escuchan reggaeton o trap... Es increíble. Yo hago una música muy diferente a la que escuchan porque yo hago pachanga. Es algo muy raro y me siento un privilegiado por ello.
¿Siente el calor del público vasco?
Aquí toqué muy pocas veces. Toqué hace cinco años en Aste Nagusia y me advirtieron de que era una plaza muy complicada. Pues llenamos y la gente se entregó, es más, hasta canté un tema de The Police porque sé que a los vascos os gusta mucho el rock&roll. Me lo pasó muy bien tocando aquí en Euskadi.
Ahora el reggaeton tiene una importante presencia en el panorama musical. ¿Siente que usted con su música abrió la puerta en el Estado a los ritmos más latinos?
En 2001 fui a Puerto Rico y allí me encontré con Nicky Jump, Don Omar... Y me dijeron que para ellos era todo un referente. Cuando ellos aún empezaban me lo dijeron y eso me llenó el alma. Eso no quiere decir, ni mucho menos que sea el Padre del Reggaetón ni mucho menos. Yo mezclo muchos ritmos en mi música, hago cumbia, mambo, pop, dance...
El gran público le conoció en 1998 con ‘El Camaleón’ y, sobre todo, más tarde con ‘La Bomba’. ¿Cuando hizo el cover de ese tema de Azul Azul esperaba que tuviese semejante éxito?
De ninguna manera. Vale Music sacó un disco con todos los grandes éxitos de King África de 1992 a 1999 y ahí metimos esa versión de La Bomba. Fui al programa Música Sí a cantar esa canción y se me olvidó la letra. Por ahí estará la grabación (risas). Yo me fui de gira a Estados Unidos y me llamaron cuando estaba en Dallas para decirme que tenía que irme rápido a España porque era una locura. Me vuelvo y nada más llegar, el policía que me selló el pasaporte me dijo “Esto es la booomba”. Yo ni me acordaba de que había grabado esa canción lo que era un tema de relleno ha resultado ser mi gran éxito.
‘La Bomba’ fue canción del verano. ¿Qué ocurre actualmente que ya apenas hay canciones del verano?
Es algo que se ha perdido, quizá porque salen tantas canciones que casi ni sabemos de quién es cada canción que escuchamos. Se mueve el mundo tan rápido, vivimos tan rápido que parece que eso de la canción del verano se ha perdido.