Mayor actividad comercial, reducción de gastos de explotación y un
mercado con fortaleza para soportar el impacto del covid en la economía. Esa es a grandes rasgos la receta de Kutxabank para hacer frente a un ciclo muy complejo en el sector, marcado por los
bajos tipos de interés y, sobre todo, por
la presión del covid a las familias y las empresas.
El banco de las antiguas cajas de ahorro vascas ganó el año pasado 216,5 millones de euros, un 20% más. De modo que distribuirá entre las fundaciones bancarias BBK, Kutxa y Vital Kutxa casi 130 millones, un 60% de los beneficios, manteniendo el volumen de dividendo extraordinario del año pasado para garantizar la obra social de las antiguas cajas de ahorro.
La comparación con un año tan atípico como fue 2020 es engañosa. Hay que buscar la referencia de 2019 para encontrar un entorno comparable y, aun así, los escenarios son dispares. La pandemia frenó en seco la evolución de los beneficios de la entidad financiera, al tiempo que retrasó la reactivación de los tipos de interés. El resultado fue una caída de beneficios de casi el 49%.
De modo que el avance del año pasado no permite amortiguar el desplome del ejercicio anterior. Sin embargo, hay claves que invitan al optimismo. Los ingresos bancarios recurrentes crecieron un 8,2%, impulsados por el fuerte volumen en la comercialización de productos, servicios y seguros.
Los
recursos de clientes gestionados por Kutxabank se elevaron un 8%, y los recursos fuera de balance, fondos de inversión y otras figuras de ahorro no ligadas a los tipos de interés, representan
más del 37% del total administrado. Más claves positivas. La inversión crediticia se incrementó en un 7,5%, con un avance del 19% en la contratación de préstamos hipotecarios, del 9% en los créditos al consumo y de un 20% en la financiación a empresas e instituciones.
Además, Kutxabank se consolida como una de las entidades con tasa de morosidad más bajas del sector (1,86%) y el volumen tota de activos dudosos continuó reduciéndose (-14%), hasta situarse en los 941 millones de euros.