El Ayuntamiento del Valle de Egüés ha emitido hace unos minutos un comunicado sobre la polémica que se generó la semana pasada tras el despido fulminante del ya exjefe de Policía Local del valle, Íñigo De Carlos, que fue destituido por la alcaldesa, Amaya Larraya (Navarra Suma). La decisión, criticada por la oposición y por toda la plantilla de la policía, llegó casualmente después de unas declaraciones que realizó De Carlos en este periódico sobre la escasez de agentes en municipio. Él mismo interpuso después una instancia en el Ayuntamiento solicitando que la alcaldesa rectificara una serie de afirmaciones, sin conseguirlo porque lo único que ha corregido es un dato de carácter meramente técnico.
Sucesión de acontecimientos
El martes pasado la web de DIARIO DE NOTICIAS publicaba un reportaje sobre la demanda de comerciantes y hosteleros del Valle de Egüés, que pedían un incremento de la seguridad tras el incremento de robos en Sarriguren. Fueron consultados propietarios de establecimientos afectados, grupos políticos y el jefe de la Policía Local, que lamentaba que no se estaba cumpliendo la Ley de Policías en un municipio en el que, según establece la norma y por el ratio de habitantes, "debería haber entre 30 y 40 agentes", cuando están 19, y cada vez son menos. Ese mismo miércoles, al día siguiente, el Ayuntamiento lanzaba una nota mediante la que hacía oficial la destitución de De Carlos, según explicaron "por la pérdida de confianza absoluta".
Reaccionaron después los grupos de la oposición, que criticaron tajantemente la decisión de la alcaldesa, y la plantilla de la Policía Municipal, que mostró todo su apoyo y cariño a su ya entonces exjefe. De Carlos presentó ese mismo viernes una instancia en el Ayuntamiento del municipio para que la alcaldesa rectificara una serie de afirmaciones que aparecían en el comunicado sobre su destitución y que, denunció, "no se ajustan a la realidad". Pues bien, parece que la alcaldesa ha rectificado, aunque no precisamente lo que De Carlos pedía que rectificara. O no todo.
La rectificación parcial
De Carlos se mostró en desacuerdo con argumentos sobre “problemas de organización del servicio”; “una gestión desde la jefatura dirigida más a sus propios intereses que al interés general de los vecinos”; “discrepancias entre el equipo de Gobierno municipal y el jefe de Policía en la gestión de multas (...) que supuso al Consistorio la devolución de 1.400 multas impuestas”; y la frase “llegado a un momento insostenible de dejación de funciones propias de la jefatura”, entre otras.
En el comunicado del Ayuntamiento que ha llegado hace apenas unos minutos, señalan que "el pasado día 21 de diciembre, el Ayuntamiento del Valle de Egüés comunicó el cese del jefe de la Policía Municipal mediante una nota de prensa. En dicha comunicación, aparecía el siguiente párrafo con un dato erróneo: “Cabe recordar, la discrepancia entre el Gobierno Municipal y el jefe de Policía en la gestión de las multas y la colocación de radares en el Valle de Egüés, la cual supuso al consistorio la devolución de 1.400 multas impuestas”. Las 1.400 multas impuestas no fueron devueltas íntegramente, sino que se devolvieron aquellas que fueron recurridas al Tribunal Administrativo de Navarra (TAN) y que dicho órgano instó al Ayuntamiento a la devolución de las mismas, siendo un total de 54 sanciones".