Bizkaia

La Banderita de Cruz Roja vuelve a la calle para ayudar a las personas afectadas por la crisis

Las familias en pobreza energética atendidas en lo que va de año superan ya todas las de 2021
La Banderita de Cruz Roja vuelve a la calle para ayudar a las personas afectadas por la crisis energética

La tradicional Fiesta de la Banderita ha vuelto a salir este martes a la calle en Bilbao. Los 350 voluntarios de Cruz Roja recogerán durante toda la mañana en sus huchas los donativos que este año se destinarán a ayudar a las personas más afectadas de Bizkaia por la crisis y la inflación.

Según ha explicado el presidente de la organización en Bizkaia, Víctor Gutiérrez, en lo que va de año han atendido a 849 familias en situación de pobreza energética, cuando 2021 se cerró con 727 beneficiarios. "Y se prevé que esa curva ascendente siga en aumento", ha advertido.

La inflación, que ya supera el 10% en los precios de bienes y servicios básicos, como consecuencia de la pandemia, el cambio climático y la invasión de Ucrania, ha hecho que cada vez más familias atraviesen grandes dificultades para pagar necesidades básicas como vivienda, gas, electricidad, alimentos y transporte.

Por ello, Cruz Roja ha puesto en marcha el plan Reacciona, para dar una respuesta "directa, inmediata y cercana" a esas necesidades, ha explicado Gutiérrez, "de forma que puedan pagar la luz, el transporte, el alquiler de ese mes...". En una primera fase, se pretende atender en Bizkaia las necesidades de 457 hogares, unas 1.828 personas.

Las familias monomarentales y monoparentales son las más perjudicadas por la crisis; representan a más de la mitad de los afectados, seguidas de las personas que viven solas. En cuanto al género, las mujeres sufren una mayor exclusión social y pobreza que los hombres y, aunque esa desigualdad se refleja en todas las edades, es entre las mujeres mayores de 65 años donde es mayor, con una diferencia de casi seis puntos porcentuales.

Juani, voluntaria a sus 81 años

Gutiérrez ha agradecido la labor de los 350 voluntarios que han salido a la calle, hucha en mano, para llamar a la solidaridad de todos los bilbainos. Una de ellas es Juani Esteban, que a sus 81 años, no falta a su cita anual con esta cuestación. Desde la experiencia que le dan los años agitando la hucha al paso de los viandante, admite que, aunque la sociedad vizcaina es solidaria como pocas "en los últimos años ha bajado un poco; yo he llegado a recaudar hasta tres huchas en una mañana". Absolutamente convencida de la necesidad de una jornada como esta, anima a los vizcainos a poner su pequeño granito de arena para ayudar a las personas que peor lo están pasando.

Juani, una de las voluntarias de Cruz Roja Bizkaia Oskar González

"Todo el bien que se pueda hacer por otras personas es mejor para todos", afirma. Ella predica con el ejemplo; además de colaborar de forma habitual con Cruz Roja, también lo hace con la Asociación Contra el Cáncer, y aportó su ayuda al Banco de Alimentos, los comedores de Irala y en labores de acompañamiento a personas mayores. "Recibes mucho más de lo que das; es una satisfacción enorme", asegura mientras, paraguas en manos, continúa recordando a los viandantes que, con un poquito que demos cada uno, el mundo puede ser un lugar mejor. "Hay que mirar un poco por los demás; todo lo que podamos hacer por ayudar es bueno", incide, dirigiéndose sobre todo a la juventud. "Se implican poco; se apuntan pero luego no vienen. Convendría que irían a estos sitios para que vieran las necesidades que tienen algunas personas y así, si empiezan desde pequeños, lo harán también cuando sean mayores", les anima.

12/10/2022