Donostia – Apenas uno de cada cinco atletas que ayer afrontaron la Behobia-San Sebastián eran guipuzcoanos. Y eso se notó en la llegada, donde resultaba sencillo encontrar atletas de fuera de nuestro territorio. Gente que vino no solo a disfrutar de la carrera, sino de las bondades gastronómicas y culturales que ofrecen Donostia y toda Gipuzkoa.
“El viernes fuimos de pintxos, ayer (por el sábado) fuimos a hacer surf a Zarautz y luego estuvimos comiendo en una sidrería”, contaban mientras reponían fuerzas Luis y Vicente, catalanes pertenecientes al club atlético David Lloyd Gavá Mar. Un fin de semana intenso, desde luego. Junto a ellos están Ana y Javi. En total, del club disputaron ayer la carrera “unas 75 personas”, muestra de la buena salud de la Behobia en Catalunya.
“Es que la Behobia tiene magia”, dicen. “Yo siempre llego llorando a meta”, reconoce Ana. “Hay que hacerla una vez en la vida”, añaden. Ellos la han hecho unas cuantas veces ya. El más veterano es Javi, con catorce participaciones: “Mi debut fue en 2009. Cayó un aguacero tremendo, pero me encantó. Mañana mismo (por hoy), antes de irnos, reservaré el hotel para el año que viene”.
Operado del corazón
Kiko y Pilar son dos madrileños, “compañeros de trabajo y amigos” que disputaron la Behobia para celebrar su exitoso paso por el quirófano. Él se tuvo que operar del corazón hace cuatro años. Ahora tiene 62 y está “muy bien” de salud. Disfrutó durante la carrera, igual que Pilar, “operada de tiroides hace cuatro meses”.
“Ha sido una alegría. Es la mejor carrera que hay, pero hay que reconocer que es matadora con tanta subida y bajada. Pero hay que vivirla”, resumen. En el momento de la foto llega José Luis, el marido de Pilar, que también se lo pasó en grande durante los 20 kilómetros.
“Un poco de sidra ayer...”
Elena y Arancha, zaragozanas, calificaban de “impresionante” su debut en la Behobia: “Nos ha encantado. Ha sido increíble toda la gente que había, aunque hemos sufrido mucho, el recorrido es rompepiernas”.
Parte de la culpa de ese sufrimiento la tuvo la visita el sábado a una sidrería. “Bebimos un poco de sidra, igual nos ha perjudicado en la carrera. Es que entra muy bien”, bromeaban. Eso sí, ayer mismo se iban “de tapeo” después de la carrera y dicen que repetirán: “Venimos seguro. De Zaragoza viene mucha gente, allí la carrera es conocida”.
En plena forma con 73 años
Uno de los veteranos ayer en la meta fue Alejandro, un leonés de 73 años. “Es mi séptima Behobia”, comentaba tras cruzar la meta: “El día no está muy bueno para correr, demasiado calor, pero estoy acostumbrado a entrenar así. He disfrutado”.
Alejandro lleva “toda la vida” haciendo deporte: “Hace diez años empecé a correr, de vez en cuando hago carreras y ahí seguimos dando guerra, aunque ahora a otro ritmo ahora. La primera Behobia la hice con 66 años. Desde entonces no he fallado, menos el año que se suspendió”.
Las cifras
25.753
Participantes tomaron ayer la salida en Behobia del total de 29.732 personas inscritas en la carrera, lo que supone un 13,38% de bajas. La organización situó en 30.000 el tope de inscripciones.
24.184
Atletas alcanzaron la meta situada en el Boulevard donostiarra. Se retiraron a lo largo del recorrido 314 personas, mientras que otras 1.243 fueron descalificadas.
7.348
Del los 24.183 finishers, 7.348 fueron mujeres, lo que supone un 28,53%. Es la participación femenina más alta de la Behobia.