Un local histórico de la hostelería vitoriana como La Bilbaína abre de nuevo sus puertas. Pone fin así a un largo paréntesis de 21 meses, iniciado el sábado 14 de marzo de 2020, cuando la eclosión del coronavirus, obligó a bajar la persiana tras decretar el estado de alarma y el confinamiento de la población.
El nuevo equipo rector de La Bilbaína ha dedicado muchas horas de esfuerzo para superar los contratiempos de toda índole y retomar el contacto con una clientela, ansiosa por ocupar la amplia zona de mesas de la renovada cafetería y observar cómo discurre la vida de Gasteiz desde el privilegiado ventanal que se abre hacia la calle Francia, junto a la plaza del Museo Artium.
Cafetería, desayunos, barra de pintxos y repostería casera
Con más de medio siglo de historia a sus espaldas como "bar emblemático para Vitoria", explican los rectores del local a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, La Bilbaína vuelve a asomar la cabeza en el sector y en una época complicada para la hostelería, por la amenaza de las nuevas restricciones que se empezarán a aplicar desde mañana mismo para la recta final de este año y recibir a 2022.
"Abrimos centrados en ejercer como cafetería, con horario de 6.00 a 22.00 horas, enfocada al café y los desayunos", apostillan entre los nervios propios de la inauguración los responsables. A la hora de seducir a la clientela, su apuesta se centra en "una gran barra de pintxos, con hasta siete u ocho variedades de tortilla y hacer mucho hincapié en la repostería casera", desgranan como pilares maestros de esta nueva etapa tras dar los últimos retoques al cambiado local.
Además de los desayunos y tentempiés matinales con la taza de café o pintxo de tortilla enfocado a los trabajadores de las oficinas cercanas o clientes esporádicos que transitan por el centro, la renovada Bilbaína va a apostar también por las "meriendas, con hasta siete variedades de café" y alguna otra idea sorprendente que brota de la cabeza de su nueva gerencia.
Perspectivas futuras
La apuesta inicial es la de concentrar el reinicio de la actividad como cafetería, sin dejar de lado que, en función de la positiva evolución del negocio a lo largo del año, rondan ideas como la de poner en servicio una "parrillada de carbón con la que poder ofrecer un menú del día y cenas", apostillan con toda la cautela y sin querer abrir nuevas vías de negocio en las primeras horas tras la reapertura.
Las últimas semanas han sido intensas para tener todo a punto y volver a trabajar. Se ha convertido esta preparación en un buen termómetro para comprobar las "ganas que tiene la gente por volver a juntarse" en torno a un café o en un local hostelero.
Tras 21 meses de dura inactividad el corazón de la calle Francia "recuperar la vida con La Bilbaína y también las de otros locales cercanos que están acometiendo unas obras", apunta en relación a la cafetería de Artium.
El lastre de las restricciones
Esas ganas se van a ver mitigadas con las medidas adoptadas hoy sobre las restricciones en horarios que van a estar vigentes para el tránsito de un año a otro y las primeras festividades de 2022. "Indudablemente es una cuestión que va a repercutir a todo el sector de la hostelería y aspectos tan variados como cargar las cámaras de bebidas para la Nochevieja o la contratación de personal", lamentan.