La mágica casa de Olentzero llega, un año más, a Basauri de la mano de la Asociación de Comerciantes “para que todos los pequeños puedan entregar personalmente allí sus cartas”, explican. Emplazada en la calle Antonio Fernández 17, permanecerá abierta del 9 al 23 de diciembre con el mítico carbonero y su inseparable compañera Mari Domingi como anfitriones, pero los txikis que se adentren en su interior tendrán, además, la suerte de encontrarse con otros simpáticos personajes de la mitología vasca como Napo (el burro del Olentzero), Basajaun, las lamias, un Iratxo (el duende de los helechos) y los ingumak (duendecillos del hogar descalzos).
El horario de visitas ha quedado fijado entre las 16.30 y las 19.30 horas, de lunes a viernes, mientras que para los sábados y domingos será de 12.00 a 15.00 horas. Y todo aquel que se saque y publique “un selfie en su muro de Instagram o Facebook del 9 al 23 de diciembre, etiquetando a la asociación @basauriko_merkatariak, obtendrá de regalo dos entradas de cine para Basauriko Social Antzokia, hasta agotar existencias” anuncian desde la asociación. Además, desde el 27 al 30, la casa de Olentzero se convertirá también en la Casa Mágica de los Cuentacuentos con sesiones diarias: a las 17.30 horas con el espectáculo dirigido a niñas y niños de 3 a 5 años y, la segunda, a las 18.30 para mayores de 6 años.
Campanadas infantiles
Por otro lado, los más pequeños de la casa podrán disfrutar, el 31 de diciembre a las 12.00 horas, de unas campanadas de fin de año organizadas a su medida por la Asociación de Comerciantes de Basauri. El punto de encuentro será la plaza Arizgoiti donde, desde una hora antes del evento, la población infantil podrá recoger las 12 gominolas de la suerte presentando el tique-regalo, que se obtiene en los comercios asociados. Y después de comerlas, una a una, con el sonido de las campanas de mediodía, habrá verbena infantil con DJ, sorpresas y mucha diversión.
Además, los días 22, 23, 29 y 30 de diciembre, se repartirán dulces navideños en cinco carros por el municipio para agradecer a los basauritarras su fidelidad al comercio local.