La cifra de negocios de la industria en Euskadi remontó la caída sufrida por los efectos de la pandemia del covid-19 y ascendió un 19% en 2021, mientras que el empleo volvió a registrar ese año una tasa positiva del 0,5% y las horas trabajadas aumentaron un 5,1%, según datos elaborados por el Instituto Vasco de Estadística, Eustat.
Esta recuperación se ha dejado sentir en prácticamente todos los indicadores económicos, pese a lo cual, el empleo, con un aumento del 0,5% en el número de personas ocupadas, volvió a la senda positiva de los últimos años anteriores a la pandemia, aunque no recuperó las cifras previas.
De este modo, el total de personas empleadas se situó en 201.950, lo que suponen 933 personas más que en 2020, pero sin llegar a las cifras de 2019. Las horas trabajadas contabilizaron un mayor repunte, con una subida del 5,1% respecto al año 2020.
Industria vasca
La industria vasca, que engloba a la industria manufacturera, las industrias extractivas, la energía eléctrica, gas y vapor y el suministro de agua y saneamiento, desarrolló su actividad en un total de 11.138 establecimientos, un 0,3% menos que el año anterior.
La cifra de negocios alcanzó los 58.757 millones de euros a precios corrientes en 2021, un 19% más que en 2020, pero por debajo todavía del montante de 2019. A su vez, los gastos de personal aumentaron un 3,9% con respecto al año previo.
El valor añadido bruto generado por el sector industrial vasco en 2021 alcanzó los 14.455 millones de euros, un 9,9% superior al obtenido el año 2020. Este valor añadido bruto a coste de factores (VBACF) es un indicador macroeconómico que representa el valor económico de la producción total de bienes y servicios descontando los insumos que han sido necesarios para dicha producción y los impuestos indirectos.
Productividad
En 2021, el sector industrial vasco registró una productividad laboral aparente, que establece el rendimiento de una unidad de trabajo aplicada al proceso productivo, de 71.575 euros por persona empleada, un 9,4% superior a la de 2020, mientras los costes de personal por persona fueron de 45.570 euros, un 3,4% mayor que los del año anterior.
Si se conjugan ambos indicadores, se obtiene la ratio de productividad laboral ajustada por salarios, que representa cuánto valor añadido se obtiene por persona empleada considerando los costes medios. Su valor para 2021 es de 157,1%, lo que supone que en términos de valor añadido se obtuvo 1,57 veces el valor de los costes por persona empleada y este indicador ha aumentado un 5,8% en 2021 con respecto a 2020.
En consonancia con estas cifras, el resultado de explotación o beneficio antes de intereses e impuestos, subió un 86,2%. La subida del resultado de explotación --que expresa si una empresa presenta pérdidas o beneficios al final de un ejercicio en referencia a su actividad principal-- en 2021 se acerca a la más alta, registrada en 2014 (99,5%).
Territorios
La recuperación de los efectos causados por la pandemia se ha visto reflejada en los tres territorios, aunque de manera desigual. De este modo, atendiendo a los principales indicadores, Bizkaia es el territorio en el que se observa una mayor recuperación y Araba el que, relativamente, se ha recuperado en menor medida de esta crisis sanitaria.
El importe de la cifra de negocios ha aumentado considerablemente en los tres territorios, pero es en Bizkaia donde más se deja notar, con un 23% más facturado que el año anterior, mientras la subida se limita al 17,6% en Gipuzkoa y al 14% en Araba.
Respecto al empleo industrial, mientras que en Gipuzkoa y en Bizkaia las variaciones, aunque no muy grandes son positivas, del 1,1% y 0,1%, respectivamente, en Araba el empleo industrial disminuyó un 0,1%.
Las horas trabajadas ofrecen tasas positivas en los tres territorios y de mayor entidad, con el 5,7% en Gipuzkoa, el 5,6% en Bizkaia y el 2,9% en Araba. En cuanto al número de establecimientos industriales, su cifra se ha reducido un 1% en Bizkaia y un 0,3% de Araba, mientras que en Gipuzkoa subió un 0,5%.
Por su parte, los gastos de personal suben más en Araba y en Gipuzkoa, con un 4,7% en ambos territorios, y algo menos en Bizkaia (2,7%).
Como resultado de la evolución de las distintas componentes, el valor añadido bruto generado por la industria en los tres territorios registró una evolución muy positiva, según el organismo estadístico. Esta magnitud en 2021 fue un 13,6% superior a la de 2020 en Bizkaia, un 7,8% en Gipuzkoa y un 7,6% en Araba.
Medido por persona empleada, Bizkaia y Gipuzkoa son los territorios extremos, dado que en el primero la ganancia de productividad se cifra en un 13,4%, mientras en el segundo apenas alcanza el 6,7%. Mientras, en Álava la productividad media aumenta en un 7,7%.
Bizkaia es el territorio en el que los costes por persona empleada han sufrido un menor ajuste al incrementarse el 2,6% frente al 3,6% de Gipuzkoa y el 4,8% del territorio alavés. Con estos datos, el coeficiente de productividad laboral ajustado por salarios resulta ser del 153,4% de los costes medios en Gipuzkoa, cuando en Bizkaia es del 158,6% y en Araba del 161,5%.
Análisis sectorial
Por sectores, los principales en Euskadi en términos de valor añadido fueron, en 2021, la Fabricación de productos metálicos, excepto maquinaria y equipo, la Fabricación de maquinaria y equipo n.c.o.p (actividades no especificadas o recogidas en otros epígrafes) y la Metalurgia, fabricación de productos de hierro, acero y ferroaleaciones, tres sectores en los que se superan ampliamente los 1.000 millones de euros de valor añadido e, incluso, en el caso del primero, los 2.000 millones.
Solo el sector de Fabricación de productos metálicos acumula el 20,2% del total del valor añadido de la industria vasca, y entre los tres mencionados superan el 40% del total (42,1%).
Estos tres sectores presentan unos porcentajes del valor añadido total de la industria acordes con el conjunto de personas empleadas en la misma, de tal modo que la Fabricación de productos metálicos engloba al 25,1% del total de empleos, la Fabricación de maquinaria y equipo, al 11,2%, y la Metalurgia, al 8,1%.
Otros sectores con valores añadidos de consideración serían la Fabricación de productos de caucho y plásticos (7,7%), la Fabricación de vehículos de motor, remolques y semirremolques (5,7%), Industria de la alimentación, bebidas y tabaco (5,6%), y Suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado (5,6%).
Por otra parte, los subsectores de la industria vasca incluyen la Industria textil, confección de prendas de vestir, industria del cuero y del calzado, Artes gráficas y reproducción de soportes grabados, Fabricación de muebles; otras industrias manufactureras, la Industria de la madera y del corcho; Captación, depuración y distribución de agua, la Fabricación de productos farmacéuticos, Coquerías y refino de petróleo y Suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado.
En 2021, la productividad laboral aparente, que supone el coeficiente entre la producción y el nivel de empleo de una economía, dentro de los subsectores osciló entre 29.000 euros por persona empleada para la Industria textil, confección de prendas de vestir, industria del cuero y del calzado y los 327.000 euros de Suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado.