La circulación de los trenes de alta velocidad (TGV) en Francia, que se ha visto perturbada por una serie de sabotajes coordinados en la madrugada del viernes, se ha restablecido notablemente este sábado, pero la vuelta a la normalidad total no está prevista hasta el lunes.
Este es el mensaje transmitido por la Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF), que en un comunicado ha insistido en que garantizará el transporte para todos los equipos que participan en los Juegos Olímpicos de París, así como para el personal acreditado.
El corredor Este, que cubre las líneas desde París en dirección de Luxemburgo y Estrasburgo, funciona normalmente desde las 6.30 hora local (4.30 GMT).
No ocurre lo mismo con los otros dos, los del Atlántico y del Norte, que también se vieron afectados por los ataques, que consistieron en incendios de equipamientos de señalización de las líneas TGV en tres puntos estratégicos.
En el del Norte, que es el que conduce de París en dirección de Lille, Londres, Bruselas, Países Bajos y el norte de Alemania, funcionan un 70 % de los trenes habituales, pero con retrasos de entre una y dos horas, ya que se tienen que desviar por la línea convencional.
Este sábado, sólo circularon allí un tercio de los habitualmente programados.
Igualmente están en servicio un 70 % de los TGV de las líneas del Atlántico, las que van de París a Bretaña y a otros destinos del suroeste de Francia, como Burdeos, Toulouse o Euskadi.
Ese eje fue el viernes el que se vio más afectado, ya que no se pudo poner en servicio hasta la tarde, y sólo muy parcialmente.
Una portavoz de la SNCF señaló a EFE que se espera "una vuelta a la normalidad el lunes".
La compañía había estimado que ayer ya se habían visto afectadas 250.000 personas.
El cuarto gran corredor de los TGV franceses, el del Sureste que va de París en dirección de Lyon, Marsella o Barcelona, no se ha visto perturbado por los sabotajes aunque allí también se detectó una tentativa.
De hecho, unos trabajadores de la SNCF sorprendieron a un grupo de individuos que huyeron en una camioneta cuando trataban de incendiar otra infraestructura de señalización.
Las autoridades no han dado detalles sobre la marcha de las investigaciones, que las centraliza la Fiscalía de París y están coordinadas por la Subdirección Antiterrorista de la Policía (SDAT).
Los miembros del Gobierno interrogados tampoco han querido especular sobre la pista que más circula entre los medios sobre una posible autoría de un grupo de ultraizquierda.
El ministro de Transportes, Patrice Vergriete, y el presidente de la SNCF, Jean-Pierre Farandou, tienen previsto comparecer a media mañana para dar más detalles sobre cómo están trabajando para restablecer completamente el servicio.