La competencia crece con la vuelta de Alec Peters

El Olentzero ya ha pasado por las casas de los gasteiztarras, pero todavía le queda entregar un último regalo, un factor común en la carta de todos los baskonistas: el regreso de Alec Peters a las canchas. El ala-pívot norteamericano, segundo capitán del equipo y llamado a ser una de las piezas más importantes del Baskonia esta campaña, todavía no ha disputado ningún partido oficial debido a una lesión en el menisco de la rodilla derecha sufrida en pretemporada.

Después del tratamiento conservador al que fue sometido y que no logró paliar los dolores del jugador, se optó finalmente por acudir al cirujano Brian J. Cole en Chicago el pasado 2 de noviembre y, tras esa intervención, el club estimó en entre seis y siete semanas su plazo de rehabilitación para volver a competir. Siendo minuciosos con el calendario, Peters debería haber regresado la semana pasada en la visita al Bayern de Múnich. En efecto, el jugador viajó con el resto de la expedición y estuvo presente en el Audi Dome, pero no participó, lo cual, estuviera o no preparado, tiene su lógica, ya que fue un partido muy intenso en el que el Bitci Baskonia contaba con numerosas ausencias, por lo que habría sido un reto tal vez demasiado exigente para él.

De hecho, el propio Peters anunció en su vuelta a Vitoria-Gasteiz a principios de diciembre que esperaba regresar a las canchas en Navidad, aunque Spahija calmó los ánimos la semana pasada fijando su vuelta para enero. Si se cumplen los pronósticos de ambos, podría estrenarse el 2 de enero ante el San Pablo Burgos o el 6 contra el Maccabi, aunque quizá sea demasiado precipitado y se prefiera ser conservador y aplazar el debut para después del periodo navideño.

Ajustes en la rotación

Sea como fuere, lo que está claro es que poder sumar a Alec Peters a la rotación será una noticia excelente para el Baskonia y para Neven Spahija, que podrá contar, a falta de Sander Raieste, con toda la plantilla al completo por primera vez en lo que va de temporada.

Esto, sin embargo, supondrá un pequeño dolor de cabeza para el croata, que hasta ahora ha apostado por una rotación de diez hombres con dos jugadores repartiéndose los minutos en cada puesto. Sedekerskis, Costello y Fontecchio se han distribuido hasta el momento los minutos en el puesto de ala-pívoty la vuelta de Peters, que si mantiene su nivel anterior a la lesión absorberá la mayoría del protagonismo en el cuatro, obligará a que tengan que jugar en otras posiciones diferentes.

Presumiblemente, Fontecchio retornará a su hábitat natural en el tres, mientras que Costello quedará desplazado al puesto de pívot y Tadas asumirá el rol de repartirse minutos con Peters. Sin embargo, Costello ha protagonizado grandes actuaciones como ala-pívot –la más reciente contra el Bayern, jugando los 40 minutos y anotando 23 puntos– y eso sin duda hará que Spahija lo considere como una alternativa para ambas posiciones.

Curiosamente, los más damnificados por la vuelta de Peters no serán quienes hasta ahora han cubierto su lugar en la rotación, sino piezas totalmente diferentes en cuanto a puesto y cualidades. El gran perjudicado será Lamar Peters, ya que en la ACB el Baskonia solo puede convocar a dos extracomunitarios, teniendo los también estadounidenses Baldwin y Alec Peters más peso específico que él en la plantilla.

En la Euroliga, donde no hay cupo de extracomunitarios, serán Marinkovic y Kurucs los que pierdan protagonismo si Spahija continúa apostando por Lamar Peters, más aún teniendo en cuenta que Giedraitis deberá jugar minutos como escolta si el entrenador quiere que coincida en la pista con Fontecchio y Alec Peters. Nnoko, por su parte, también podría pasar a tener un papel más residual todavía si Enoch y Costello pasan a ser los dos pívots principales del Baskonia.