La campaña de la anchoa acaba de finalizar de forma satisfactoria; el tamaño del pescado ha sido mejor y, además, se ha vendido a mejor precio. En ese contexto, a la de la anchoa le ha tomado el relevo la costera del bonito que ya el año pasado obtuvo grandes resultados.
La semana pasada llegaron los primeros barcos al puerto de Hondarribia con 12.000 kilos de bonito que se vendieron a 6€ el kilo, aproximadamente. La captura en Gipuzkoa se realiza, principalmente, mediante cebo vivo y con caña.
En 2022 la campaña del bonito duró más para la flota vasca, duró hasta octubre, consiguieron aumentar los resultados de la campaña de 2021 y capturaron en total 9.935 toneladas, un 55% de la cuota estatal. Pero ahora los buenos resultados del año pasado pueden afectar negativamente a los resultados económicos de este año ya que las conserveras han alertado de que tienen mucho stock. En Gipuzkoako Kale Nagusia de Onda Vasca nos daba cuenta de esa preocupación Miren Garmendia, la secretaria de la Federación de Cofradías de Gipuzkoa.
Garmendia ha explicado que comienzan la temporada esperanzados y tanto los pescadores como desde la administración están dispuestos a darlo todo para conseguir la mayor de las rentabilidades, aunque nos decía "es pronto para hacer previsiones pero parece que el mercado no está tan contento, el mercado de las conservas de bonito es muy importante para nosotros y desde las conserveras nos han comunicado que tienen mucho stock por lo que comercialmente no creen que vaya a ser un gran año".
Por otra parte, desde la Federación de Cofradía siguen reivindicando una buena gestión de las cuotas que sirvan para determinar de una forma más ajustada lo que cada barco podría capturar "con la cuota sin determinar la competitividad entre los pescadores es muy alta ya que tratan de pescar la mayor cantidad posible de pescado".