Extraña y curiosa al mismo tiempo. Así es la nueva tendencia que comienza a verse en algunas terrazas de Vitoria, algo que está llamando la atención de más de un hostelero.
La pregunta del millón es la siguiente: ¿se le puede echar un cubito de hielo al vino? ¿sobre todo al blanco?
Importada de América, esta tendencia creciente en otros países de añadir hielo al vino comienza a verse en bares de la capital alavesa.
Parece que las continuas y largas olas de calor que ha vivido Vitoria en los últimos meses han dado un impulso a esta tendencia para enfriar nuestras bebidas durante la época del año en la que suben tanto las temperaturas.
Lo que sí hay que tener claro, tal y como explican expertos del sector, es que con un hielo estará más frío el vino, sí, pero también disminuirá mucho su sabor.
¿Un sacrilegio?
Los expertos coinciden en que con el hielo se estropean todas las cualidades del vino.
Por lo que si una botella no tiene la temperatura adecuada para el cliente, lo mejor sería pedir una cubitera y meter la botella unos minutos.
Pero en el caso de querer unos hielos en el vino, lo más adecuado sería que el vino se sirviese en una copa y echar hielos grandes y consistentes para que no se derritan y se pueda enfriar el recipiente (la copa), y así evitar aguar el vino lo máximo posible.
¿Una tendencia que ha llegado para quedarse en Vitoria?