Los partidos conservadores italianos, encabezados por los ultraderechistas Hermanos de Italia y la Liga, han ampliado su ventaja en intención de voto tras el pulso público que se libra en la izquierda por la ruptura del bloque que intentaba conformar el líder del Partido Democrático (PD), el ex primer ministro Enrico Letta.
Hermanos de Italia, el partido que encabeza Giorgia Melonia, que ya reivindica su derecho a ser la próxima primera ministra, figura como favorito con un 24,2 por ciento, según una encuesta publicada este martes por la cadena Sky TG24. En total, la coalición de derechas sumaría el 48,2 por ciento de los sufragios, 2,2 puntos más que en la medición anterior.
En cambio, retrocede el potencial bloque de izquierdas, del 33 al 28 por ciento, después de que el domingo saltase por los aires el bloque de Letta con la salida de Acción. El líder de esta formación, Carlo Calenda, afeó al PD la falta de concesiones y busca ahora reposicionarse.
El Movimiento 5 Estrellas (M5S) ya ha dejado claro que concurrirá en solitario a los comicios del 25 de septiembre, mientras que el ex primer ministro Matteo Renzi y su Italia Viva buscan atraer a Calenda para un 'tercer polo' alternativo que cada vez parece más tangible.
El propio Calenda se ha mostrado dispuesto a hablar con Renzi para tejer una "propuesta seria", como ha reconocido en declaraciones al Canale 5, y el diario 'La Presse' da por hecho el pacto, que ya estaría muy avanzado tras las negociaciones entre representantes de ambos bandos.
En el bando conservador, tanto Meloni como el líder de la Liga, Matteo Salvini, se han burlado del "caos" que, en su opinión, existe en el bloque rival, mientras que Forza Italia, la formación de Silvio Berlusconi, ha presentado este martes una campaña con la que aspira a recuperar parte del terreno perdido en estos últimos años en beneficio de formaciones más radicales.
Berlusconi, sin embargo, guarda silencio sobre su futuro político. "Ya veremos", ha dicho en una emisora de radio al ser interrogado sobre una potencial candidatura en las inminentes elecciones, después de que este mismo año fracasase en su intento de ser presidente de Italia por la falta de consenso sobre su figura.