No hay derrotas buenas, pero sí positivas. Derrotas que duelen, porque a nadie le gusta perder, pero que no escuecen tanto. No hacen mella en el orgullo. Porque de ellas se puede sacar una lectura positiva. Y eso pasó este sábado en Villava. El Gurpea Beti Onak Azparren Gestión cayó ante el Rocasa Gran Canaria en la Copa de la Reina por 25-26, fue eliminado del torneo y se quedó sin billete para la fase final que se disputará en abril en Málaga. Pero lo hizo plantando cara. Completando un gran partido tanto en defensa como en ataque y brillando en la portería. Recuperando, así, su mejor versión y una confianza que será fundamental de cara ahora a la competición liguera. Algo que era muy necesario.
Faltó estar más atinadas en algunos lances. Los detalles. Porque el Gurpea Beti Onak salió incisivo, dejando a un lado los reveses de la Liga ante un rival inmerso también en una racha negativa. Pero que no por ello dejó de imprimir mucho peligro.
La defensa 6/0 planteada por las navarras funcionó desde el inicio, frenando la presión de un Rocasa comandado por Marta Mangué desde el central. Los primeros compases fueron de alternancia en el marcador. Con un Gurpea Beti Onak que volvía a confiar en la efectividad de Valeska Lovera desde el exterior y desde los siete metros. Con Lyndie Tchaptchet ganando la partida desde el pivote a la zaga canaria y con una avispada Paula Garcia Locay robando en defensa y resolviendo a la contra. Así, las navarras gozaban de ligeras ventajas (4-2, m.4), pero el Rocasa sabía cómo recuperarlas. Sacó provecho a algunas pérdidas de balón locales, se encomendó a Palomino en la portería y tiró de Mbengue en el ataque (9-10, m.15).
Miguel Etxeberria movió el banquillo, al igual que las canarias. Patri Encinas comenzó su recital de paradas –firmó 17–, se convirtió en la pesadilla de Kristensen en las contras y el Beti Onak seguía enganchado así al partido. Aprovechó su superioridad en el tramo final del primer acto, varió a la 5/1 con Ainhoa García de avanzada y dos goles de Kassia César encarrilaron el choque al descanso (16-14).
Lourdes Guerra suplió a Palomino bajo los palos en la segunda mitad y su entrada en la pista fue determinante. Falcón igualó pronto la contienda, pero el Gurpea Beti Onak seguía centrado en defensa, con García Locay de nuevo robando, para no irse del partido. Tres intervenciones seguidas de Patri Encinas fueron claves para que el Rocasa no abriera brecha en el marcador (20-20, m.40), máxime cuando las navarras se topaban con Guerra.
El equipo canario comenzó a gozar de ligeras ventajas (21-23, m.48), en buena medida gracias al acierto de Mbengue desde el exterior. Pero las navarras eran capaces de darle caza. A falta de tres minutos, Eider Hernández ponía la igualada (25-25) y la esperanza de soñar con el pase. El gol de Mbengue, que suponía el 25-26, obligó a Etxeberria a parar el tiempo, puesto que su equipo gozaba de un balón que podía empatar el choque a falta de dos minutos y provocar la prórroga. Pero Eider se topó de nuevo con una soberbia Guerra.
La derrota dejaba al Gurpea Beti Onak fuera de la Copa. Pero con la cabeza bien alta.
ETXEBERRIA: "ES UNA PENA, LO HEMOS TENIDO AHÍ"
Miguel Etxeberria, a pesar de la derrota, entraba con una sonrisa en la sala de prensa después del partido. Porque su equipo estuvo a punto de dar la sorpresa, aunque se escapó. “Lo hemos tenido ahí. Han faltado detalles. Ha sido una pena, porque hemos hecho un partido muy bueno”, resaltaba. “Hemos estado concentradas y hemos vuelto a recuperarnos a nosotras mismas. Nuestro estilo de juego”, añadía. El técnico navarro se mostraba “orgulloso” de que el Gurpea Beti Onak “haya sido capaz de salir del bache”, además de “plantarle cara a todo un Rocasa y con la grada llena”. “Villava ha estado de diez”, resaltaba. Y aseguraba tajante: “Es una de las tardes más bonitas que me han tocado vivir como entrenador”. Lo más importante para este partido, recordaba, “era recuperarnos como equipo” y vaticinaba que si siguen en esta línea, “saldrán los resultados”. Por su parte, la portera Patri Encinas aseguró que se iba "contenta por el equipo", ya que jugó "al máximo nivel" y se acabó perdiendo "por sólo un gol". Ahora, toca centrarse en la Liga y en los dos partidos en casa que le esperan a las navarras: el del Motive.Co Gijón del próximo sábado y el del BM Porriño.